El jurado popular que empezará a deliberar el lunes 18 de noviembre sobre la autoría del crimen de Samuel Luiz, con cinco acusados, tiene tres ejes para fundamentar su veredicto: el vídeo de la agresión, los senegaleses que lo intentaron proteger y la investigación policial.

Hay algo que nadie discute: a Samuel Luiz lo empezaron a agredir el 3 de julio de 2021 frente a la playa de Riazor, en A Coruña, los acusados Diego Montaña y Alejandro Freire 'Yumba'. Entonces Catherine 'Katy' Silva apartó a la amiga de Samuel y, a continuación, llegaron al grupo Kaio Amaral Silva y Alejandro Míguez.

La víctima después escapó y el grupo -en el que también estaban David Rodríguez 'Pompo' y Marco Figueras, los entonces menores ya condenados- lo persiguió. Lo volvió a agredir en otras tres ubicaciones hasta acabar con su vida. En ese recorrido se incorporaron dos senegaleses para intentar protegerlo. Hay un vídeo que muestra toda la secuencia.

A partir de ahí, los acusados y sus defensas han sembrado el juicio de dudas sobre lo ocurrido, con nuevos cambios de versiones sustentadas en testimonios de sus amigos o de personas que pasaban por allí y parecen haber olvidado lo sucedido, al tiempo que intentaban desacreditar a la Policía, dudar de lo que se ve en el vídeo o cuestionar a las únicas tres personas ajenas a ellos que estuvieron en el núcleo de la agresión: la amiga de Samuel y los dos senegaleses.

La amiga de Samuel Luiz, Lina, junto con Ibrahima Diack y Magatte N'Diaye son las tres únicas personas que estuvieron en el núcleo de la agresión y que no tienen relación de amistad con ninguno de los acusados.

Lina mantuvo desde el principio que 'Katy' la empujó al grito de "tú lárgate de aquí que no pintas nada" para evitar que defendiese a Samuel. La acusada alegó que la apartó para luego intentar contener a Diego Montaña, que entonces era su pareja.

Los dos senegaleses relataron una persecución a patadas y puñetazos mientras intentaban sostener a la víctima y frenar a sus agresores: "No podemos escapar porque nos están rodeando y golpeando continuamente. A veces saltaban, algunos lanzaban golpes por todos los lados, rodeándonos. Nos perseguían sin parar", dijo Ibrahima Diack.

La Policía Nacional montó el puzle de lo ocurrido con el vídeo como pieza fundamental y el testimonio de todos los allí presentes como elemento crucial para esclarecer lo sucedido.

No duda de la participación de los cinco acusados y considera que su papel fue clave en la muerte de Samuel Luiz que, según la autopsia, fue "por golpes múltiples en el contexto de una agresión".

Los identifica en el vídeo en todo momento, en el caso de Diego Montaña, Alejandro Freire y Kaio Amaral Silva como agresores directos -los dos primeros alegan que solo al principio y el tercero lo niega- y en el de 'Katy' Silva y Alejandro Míguez por evitar la defensa o la huida de Samuel.

En el caso del último, la Policía ve que inició la primera persecución a Samuel Luiz. Además, un amigo suyo aseguró que le había dicho "no pude hacer nada porque me agarró un negro", lo que para los agentes implica que impidió que la defensa de Samuel.

Las tres acusaciones, lideradas por la Fiscalía, piden penas de entre 22 y 27 años de prisión por asesinato con ensañamiento y alevosía, además del robo del móvil en el caso de Kaio Amaral Silva; aunque aceptarían que Míguez y 'Katy' Silva fuesen cómplices con una rebaja de hasta 13 y 14 años y medio respectivamente.

Consideran culpables a los cinco de golpear, impedir la defensa o impedir la huida de Samuel Luiz, lo que para estas partes es suficiente para vincularlos al asesinato.

Diego Montaña y Alejandro Freire aceptarían un homicidio, incluso por imprudencia; Alejandro Míguez, que dice que no pegó, se ha abierto no obstante a aceptar lesiones; Kaio Amaral Silva solo se declara autor de una apropiación indebida y Catherine Silva solo plantea la libre absolución. 

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