La carencia material y social severa va en aumento en España, en contraste con la evolución en países de la Unión Europea. Este indicador refleja a aquellas personas que, con sus ingresos, no pueden cubrir necesidades tan básicas como una comida de carne, pollo o pescado, al menos, cada dos días. Informan en el vídeo B. Agost y A. Chamoso.
Sonia tiene cuatro hijos, dos de ellos menores. Es limpiadora, una trabajadora pobre que no puede permitirse calentar su casa, ni dar de comer carne o pescado cuando quiere a sus hijos. Sobrevive porque tiene alquiler social.
"A pesar de que trabajo tengo que ir a una ONG a por alimentos. Yo nunca me imaginaba verme así, pero es lo que hay", cuenta a Informativos Telecinco. Y es que son las familias monoparentales y las que tienen dos o más hijos las que caen en las redes de la pobreza con más facilidad en España, un rasgo que difiere del resto de Europa donde son los mayores de 65 años los más vulnerables.
"Los mayores están protegidos por las pensiones y eso hace que el porcentaje de mayores de 65 años que está en situación de carencia material severa sea más bajo que en otros grupos de edad", explica María Miyar, directora de Estudios Sociales en Funcas.
Otro ejemplo es el de Ana María, que se quedó sin trabajo y se ha ido a vivir a casa de su madre con su hija y su marido. El único ingreso que entra en casa es la pensión del hermano.
"Yo a veces no tengo para el desayuno de los niños", reconoce. Las ONG que día a día se chocan con esta realidad corroboran el aumento de la pobreza en España a pesar de la mejora de los indicadores económicos.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.