Muere una ciudadana española de 42 años en Estambul tras una operación estética
Un día después de la intervención, la mujer comenzó a sufrir dificultades respiratorias y permaneció ingresada, pero falleció de una parada cardíaca
La Fiscalía turca ha abierto un caso de "homicidio por negligencia"
El médico que realizó la operación fue detenido y después ha quedado en libertad con cargos
Una ciudadana española ha muerto en un hospital privado de Estambul tras haberse sometido a una operación quirúrgica con fines estéticos en la capital turca.
De 42 años y madre de dos hijas, residía en la Comunidad de Madrid y se sometió a una operación estética a principios de este mes de agosto.
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Un día después de la intervención, la mujer comenzó a sufrir dificultades respiratorias y permaneció ingresada, pero falleció de una parada cardíaca, según medios turcos citados por EFE.
Investigan un “homicidio por negligencia” tras la operación estética
Tras lo ocurrido, la Fiscalía turca ha abierto un caso de "homicidio por negligencia" y ha detenido al médico que practicó la operación estética, si bien ha quedado en libertad con cargos mientras la investigación continúa.
Turquía es un destino habitual y popular del llamado ‘turismo sanitario’, dado su desarrollo tecnológico en Medicina, su amplia oferta en operaciones estéticas e implantes de cabello, así como otros procedimientos como el de fertilización in vitro.
A este respecto, el Ministerio de Sanidad otorga certificados de licencia para el 'turismo sanitario' y muchos hospitales públicos, además de los privados, cuentan con una unidad de intervenciones estéticas.
No obstante, los medios turcos difunden con frecuencia casos de complicaciones ocurridas en clínicas ilegales que funcionan sin los controles preceptivos, pero también varios hospitales aprobados por el Ministerio se han visto envueltos en polémicas.
Como ejemplo de esto último, en marzo de 2023 un escándalo sacudió a la opinión pública turca al denunciarse la intoxicación de 250 pacientes, la mayoría extranjeros, tras someterse a intervenciones de inyección de botulina en el estómago como parte de un terapia para adelgazar. Los hospitales implicados tenían los certificados en regla, pero expertos turcos sospechan que se proveían de botox en el mercado negro para satisfacer una demanda por encima del límite autorizado por el Gobierno. Además, el Ministerio de Exteriores de España también alertaba el pasado año tras varios fallecimientos.
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