Santiago Lara acaba de cumplir un sueño: graduarse en Psicología. Un camino que no ha sido nada fácil debido a la historia de superación que hay detrás. A los 18 años le diagnosticaron un tumor cerebral que, sin saberlo, le llevaría a estar más de un año ingresado entre hospitales y un año en coma.
Los médicos llegaron a pronosticarle que no cumpliría los veinte años y que moriría antes. Ahora, como psicólogo recién licenciado, celebra haber cumplido su sueño. "En el hospital me di cuenta que todo el mundo tienen un cometido en esta vida. El mío es ayudar a los demás y sacar sonrisas", cuenta a Informativos Telecinco.
"Quiero que sepáis que los sueños a veces se cumplen, pero que, para ello, hay que perseguirlos mucho", le contó a sus compañeros en su discurso de graduación.
Perseguirlos y no dejar que se escapen como también hizo Ignacio. Con cuatro años descubrieron que tenía una enfermedad en los huesos y tuvo que enfrentarse a 14 operaciones durante ocho años.
Esa situación le impidió asistir a clase de forma presencial. "De todas las complicaciones que había en esta enfermedad cogí absolutamente todas", El primer aula que pisó fue en la Facultad de Derecho, donde ha terminado con 15 matrículas de honor y la admiración de su familia. Jóvenes cuyo esfuerzo es inspiración para enmarcar.
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