La sustancia cancerígena que inhalamos en el interior de nuestros vehículos: "Con el calor se multiplica por cinco"
Un estudio confirma que el trifosfato es un componente químico que está en los asientos de nuestros coches y que es cancerígeno al inhalarlo
El experto en química ambiental, Xavier Giménez: "La probabilidad del desarrollo del cáncer es tan pequeña que hay decirlo"
"Los sistemas antiincendios, a los que obliga la ley, contienen sustancias tóxicas y cancerígenas que se liberan por el calor", avanza Isabel Jiménez
'Informativos Telecinco' muestra todos los detalles del último estudio realizado en Estados Unidos donde aseguran que las personas inhalamos sustancias cancerígenas en nuestros vehículos liberadas por el calor. El experto Xavier Giménez, profesor de química ambiental UB, cuenta todos los detalles y desvela cómo podemos evitar que estos gases nos contaminen.
Isabel Jiménez avanza las claves del "estudio bastante alarmantes sobre las consecuencias en la salud de algunos componentes de los coches". Tras esto, la presentadora continúa dando más información: "Los sistemas antiincendios, a los que obliga la ley, contienen sustancias tóxicas y cancerígenas que se liberan por el calor".
Trifosfato: así es el componente que puede ser cancerígeno en nuestros coches
Cuando estamos en el interior de un vehículo creemos que el peligro está en la carretera. Sin embargo, un estudio muestra con todo tipo de detalles que existe un gran peligro con lo que respiramos dentro del habitáculo. Según informan Juan Tejón y Alma Trabajos, el origen de todo el problema tiene nombre y es una sustancia llamada "trifosfato".
Xavier Giménez confirma la información del estudio estadounidense y añade: "Está muy bien hecho, técnicamente es incuestionable". El trifosfato es un elemento tóxico potencialmente cancerígeno que se usa en la gomaespuma de los asientos de los coches. En cuanto a padecer la enfermedad, el profesor químico es claro: "La probabilidad del desarrollo del cáncer es tan pequeña que hay decirlo de este modo".
El estudio explica que "el calor multiplica por cinco la posible inhalación de estos gases nocivos" y el experto en química ambiental apaga todas las alarmas explicando cómo podemos evitar esta posible infección con unos simples y sencillos pasos en nuestros vehículos: "Solamente tenemos que abrir las puertas, dejar ventilar, que baje la temperatura y ya ponemos en marcha el aire acondicionado".