Recorrer la península con un coche eléctrico es posible -y sin incidencias-

  • El sector asegura que la red de recarga es suficiente para la actual demanda en España

  • Aún así, exigen múltiples mejoras para acercarse a la media europea

  • Reclaman una mayor cobertura de cargas ultrarrápidas, la unificación de pago y menos burocracia en infraestructura

Por delante casi 900 kilómetros y más de 11 horas por carretera con su mujer y dos hijos pequeños. Es el trayecto de Josu ('El Tesla en el Norte', en la red social X) y su familia en un vehículo eléctrico, para desplazarse desde Getxo (Vizcaya) hasta Sevilla para disfrutar de la final de la Copa del Rey de fútbol.

Una ruta en la que han planificado tres paradas de menos de treinta minutos para recargar la batería del coche y que logran realizar sin incidencia técnica alguna. Un viaje, con vehículo eléctrico, que demuestra que, con planificación previa, se puede recorrer la península de norte a sur, entre otras rutas de larga distancia.

Por eso, lo ocurrido en la parada de recarga eléctrica de la A-3, en Atalaya de Cañavate (Cuenca), en plena Semana Santa, con decenas de automóviles eléctricos Tesla a la espera de su turno durante horas para recargar la batería, lo matiza el propio sector. Desde AUVE, la Asociación de Usuarios de Vehículos Eléctricos, se asegura que, a pesar de que España está por debajo de la media europea en cuanto a parque de vehículos e infraestructura eléctrica, la actual red de recarga, tanto urbana como interurbana, es suficiente para la demanda de hoy.

En carreteras y autovías, eso sí, sólo el 9,1% de los puntos públicos tienen potencias superiores a los 150 kw que permiten recargas en menos de media hora. Por eso usuarios, asociaciones y compañías afectadas demanda mejoras y una mayor cobertura de las recargas ultrarrápidas, además, de pedir la unificación, también, de la forma de pago y que se puedan acortar los plazos, con menos burocracia, matizan, para crear nueva infraestructura y acercarse a los estándares europeos.

Todo para potenciar un concepto de conducción diferente, recuerdan, del que dependen los objetivos de reducción de gases contaminantes y que trata de demostrar, también, en el consumo individual, su ahorro económico en el día a día.

Un sector, el de la conducción eléctrica, en plena expansión que suma ya nuevas tecnologías de emergencia tanto en ciudad como en carretera para evitar problemas de recarga en una red interurbana en España que presenta carencias.

Según datos de ANFAC, casi la mitad (3.400 kms.) de los 7.300 kilómetros de carreteras y autovías del país no cuenta, de momento, con supercargadores de más de 250 kw de potencia en tramos de más de 100 kilómetros de distancia.

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