{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
El asesinato de dos hermanas de 2 y 4 años en Almería, --presuntamente envenenadas por su padre--, elevaría el número de víctimas menores de la violencia vicaria este 2024 a justo el doble de los que murieron el año pasado. Concretamente, de confirmarse así la naturaleza del doble crimen, serían en total 54 los menores asesinados por este tipo de violencia machista desde 2013, año en el que comenzó a hacerse el registro, como informa en el vídeo Ángeles Blanco.
Con este caso, solo en este año ya serían cuatro los menores asesinados por sus padres con el objetivo de hacer el máximo daño posible a la progenitora, tras el caso de los hermanos de 7 y 10 años en Barcelona en enero.
Las autoridades, así como la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género, analizan si el de Almería también se trata de violencia vicaria, una hipótesis hacia la que apunta la Guardia Civil y que parece clara: el presunto asesino de sus dos hijas en Alboloduy, Almería, tenía antecedentes por violencia machista contra su expareja y una orden de alejamiento de ella.
Los hechos acontecidos en la pedanía almeriense se produjeron este domingo, donde el padre de las niñas se suicidó tras presuntamente asesinarlas.
Se investiga no solo la naturaleza del doble crimen, sino además por qué las pequeñas estaban con el padre si existía una orden de protección por violencia de género, tal como ha aseverado el subdelegado del Gobierno en Almería, José María Martín. Desde 2021, la ley establece que se suspendan las visitas de menores en estos casos, salvo argumentación motivada del juez.
“No hay manera de causar mayor daño a una madre que asesinando a sus hijos". Así lo subraya en un escrito monográfico sobre violencia vicaria la Fiscalía de Sala de Violencia sobre la Mujer, que explica que "cuando en una relación de afectividad basada en el desequilibrio y en el ánimo de posesión, el dominador asesina a los hijos de su pareja, bien sean propios o ajenos, sabe que le está haciendo más daño que acabando con su propia vida".
Xavi y Noa en Cataluña, Anna y Olivia en Canarias, Ruth y José en Andalucía, Nerea y Martina en Comunidad Valenciana… también eran hermanos y fueron asesinados por su padre. En todos ellos el asesino estaba separado de la madre.
En más de la mitad de los 52 casos confirmados, --54 si se sumase ya el caso de Almería--, el agresor se suicidó tras perpetrar el crimen. 30 en total, mientras otros siete lo intentaron.
Además, en la gran mayoría de los casos, --47--, el asesino era el padre del menor asesinado, mientras que en cinco era la pareja o expareja de la madre.
Tan solo en 14 de los 52 asesinatos constaban denuncias previas por maltrato contra el homicida, según las estadísticas de la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género.
Por su parte, en el 33% de los casos el homicida era expareja de la madre y en el 67 %, aún era marido o pareja legal.
En total, si se confirma el asesinato de las hermanas de Almería como asesinato por violencia vicaria, Andalucía y Madrid serán las comunidades autónomas más castigadas por estos asesinatos, con diez casos cada una.
Desde 2013 han registrado siete en la Comunidad Valenciana y en Cataluña, seis en Canarias; cuatro en Castilla-La Mancha; tres en Galicia; dos en Asturias; y Aragón, Baleares, Cantabria, Castilla y León y Región de Murcia tienen un caso cada una.
El Ministerio del Interior evalúa desde 2019 el riesgo al que están expuestos los menores hijos de mujeres víctimas de violencia de género y ha detectado a 4.433 niños y niñas en riesgo de sufrir violencia vicaria.
En febrero de 2024 había 1.455 menores en riesgo de ser directamente agredidos por los padres o las parejas o exparejas de sus madres: 3 en riesgo extremo (con grave riesgo para su vida); 163, alto y 1.289, medio.
A este respecto, cada vez que Interior detecta una situación de riesgo en los menores, alerta a los tribunales y a la fiscalía con una diligencia automática que persigue que se impongan medidas urgentes de protección.
La violencia vicaria se integró en la ley contra la violencia de género en 2021 y la norma se volvió a modificar en 2022 para reconocer como víctimas directas a las madres de menores asesinadas en crímenes vicarios, que hasta ese momento no tenían derecho a las ayudas del Estado.
Ante la necesidad de ayuda, el 016 atiende a todas las víctimas de violencia machista las 24 horas del día y en 53 idiomas diferentes, al igual que el correo 016-online@igualdad.gob.es; también se presta atención mediante WhatsApp a través del número 600000016, y los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10.
En una situación de emergencia, se puede llamar al 112 o a los teléfonos de la Policía Nacional (091) y de la Guardia Civil (062) y en caso de no poder llamar se puede recurrir a la aplicación ALERTCOPS, desde la que se envía una señal de alerta a la Policía con geolocalización.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.