La búsqueda de los dos menores de 16 y 17 años desaparecidos el pasado 8 de marzo cuando pescaban en la zona de El Confital de Las Palmas de Gran Canaria se ha extendido al sur de Tenerife, según ha informado el lunes la Jefatura Superior de la Policía Nacional en Canarias. En la búsqueda intervienen medios aéreos, de seguridad ciudadana y de la policía judicial.

El nuevo punto del operativo se ha centrado en la costa sur de Tenerife, desde Abades hasta El Médano, ya que se baraja que hayan podido ser arrastrados hacia esa zona por las corrientes, ha precisado el gabinete de prensa de la Policía Nacional.

A los dos jóvenes se les perdió la pista tras no regresar de una jornada de pesca el viernes 8 de marzo. Ese día, por la tarde, los familiares se percataron de que no habían regresado a casa. Un amigo de los chicos condujo entonces a los servicios de Emergencias hasta donde creían que podían estar, en las inmediaciones de la bahía de El Confital, en Las Palmas de Gran Canaria. Allí, habrían ido a pescar con caña y encontraron sus pertenencias y sus teléfonos móviles.

Cuando desaparecieron, no había alerta por temporal, pero la isla llevaba varios días con viento y oleaje intenso. Un día después, la Dirección General de Emergencias de Canarias declaró la situación de alerta por fenómenos costeros.

De hecho, el intenso oleaje complicó las labores de búsqueda para las que se desplegó un dispositivo por tierra, mar y aire. El mismo viernes en el que desaparecieron los jóvenes, los buzos de los Grupos Especiales de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil tuvieron que abandonar antes sus labores, ya que las malas condiciones provocó que el oxígeno de sus bombonas se agotase antes que en circunstancias normales.

Al día siguiente, dos tripulantes de una salvamar de Salvamento Marítimo resultaron heridos de carácter leve tras un golpe de mar durante las labores de búsqueda.

El dispositivo ha continuado buscándoles en estos diez días. Los buzos de los Grupos Especiales de Actividades Subacuáticas (GEAS) han trabajado en un fondo submarino totalmente volcánico repleto de oquedades, cuevas y rajones antes de decidir extender la zona de búsqueda a la costa sur de Tenerife.

Y también se ha desplegado una patrullera del servicio marítimo, así como una unidad aérea de la Guardia Civil, que está coordinada con el resto de medios a través del puesto de mando avanzado, que también dispone de presencia permanente de agentes del cuerpo. Además, intervienen efectivos de la Policía Local, de Bomberos de Las Palmas de Gran Canaria y el helicóptero del Grupo de Emergencias y Salvamento del Gobierno canario, además de unidades de drones, ha indicado el 112. 

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