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Los aerogeneradores están cada vez más presentes en la geografía española, además pueden servir cuando dejan de ser útiles después de años de uso. Algunas empresas los reconvierten en muebles o en material de construcción.
La vida útil de un aerogenerador eólico es de 25 años y, a partir de este momento, se abren múltiples posibilidades para un nuevo uso, se pueden convertirse en muebles o en material de construcción.
La empresa gallega ‘Ventos Metódicos’ recoge por toda Europa palas de aerogeneradores que ya han cumplido su vida útil para darle un nuevo uso. Alex Costa, cofundador, afirma que viajan con un camión aserradero al parque eólico “y ya directamente ahí podemos seccionar las palas”.
Residuos que se convierten en luces, muebles, estanterías, maceteros, mesas, hasta una escalera “hecha con la propia madera noble que podemos encontrar en la pala eólica”
Los usos son múltiples, con las fibras de vidrio procedentes de las palas se consiguen carreteras más resistentes, además la economía circular ha llegado también a las renovables y con ella un mercado de segunda mano del que participa Iberdrola.
Liana Petrosyan, responsable del compras renovables de Iberdrola, confirma que suelen “comprar máquinas completas, palas, rótores, multiplicadoras, palas”. Los parques eólicos de la compañía en España tienen 20 años y algunos componentes necesitan sustituirse.
Europa se ha propuesto que en 2025 ninguna pala acabe en un vertedero, pero para eso es necesario impulsar la industria de la segunda vida.
Hay varias plantas de reciclaje en construcción en España y fondos europeos para liderar este reto.
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