La sequía está obligando a muchos municipios a implantar medidas que palíen la falta de agua por la escasez de precipitaciones. En el municipio de Manresa, en Barcelona, ya aplican lo que consideran un "ahorro silencio" al bajar la presión del suministro a los ciudadanos. Una medida que también se lleva a cabo en otras ciudadades.
La falta de lluvias en Cataluña ha puesto a esta comunidad en situación de prealerta por sequía. Por el momento se ha fijado un consumo máximo por persona de 210 litros al día, pero si las lluvias siguen sin llegar, esa cantidad puede bajar más aún.
En Manresa, las autoridades locales han bajado la prtesión de suministro con lo que es posible ahorar hasta un cincuenta porciento. Pero los expertos alertan de que esta medida afectará a los que viven en pisos altos y a determinados electrodomésticos que necesitah un caudal determinado de servicio.
En otros municipios, como es el caso de Jerez, en Cádiz, el ayuntamiento ha adoptado esta misma medida pero la ha modulado por tramos horarios. En ambos casos se busca no llegar al punto de implantar restricciones más severas en el suministro de agua potable a la ciudadanía.
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