“Hito climático”: el calentamiento del planeta rebasa los 2 grados por primera vez
El viernes, la anomalía en la temperatura global se disparó hasta los 2,07 grados; el sábado se repitió, con 2,06 grados
“Es el día más cálido en la Tierra desde que hay registros”, constatan meteorólogos y climatólogos
Un estudio de Copernicus revela que 2023 podría ser el año más cálido desde que hay registros
Era algo anunciado por climatólogos y meteorólogos, dada la evolución de las temperaturas que estamos viendo en lo que va de año y acaba de ocurrir, el 17 de noviembre. Por primera vez, el planeta ha superado en 2 grados la temperatura media de la época preindustrial (1850-1900). Es algo insólito, histórico. Y muy preocupante. “Es el día más cálido en la Tierra desde que hay registros”, constata el meteorólogo y portavoz de la AEMET, Rubén del Campo.
Esos 2 grados de aumento en la temperatura global es el límite que no hay que sobrepasar, a donde no habría que llegar en ningún caso para finales de siglo, si se quieren evitar los peores efectos del cambio climático. Estamos en 2023 y ya hemos llegado a él, aunque de forma puntual, y no permanente, todavía
MÁS
El pasado viernes, la anomalía en la temperatura media del planeta se disparaba hasta los 2,07 grados. Y se repitió el sábado, 18 de noviembre, con 2,06 grados. Vean el siguiente gráfico del ‘Servicio de Cambio Climático Copernicus’.
Es importante aclarar que los límites impuestos en el Acuerdo de París (evitar los 2 grados de aumento para finales de siglo, y tratar de no superar el 1,5º) no se refieren a datos diarios, sino a “rebasar esa barrera de manera permanente, en un periodo de 30 años”, explica Del Campo.
Según lo firmado en París en 2015, el objetivo era evitar a toda costa que una anomalía climática como la que se acaba de registrar se convierta en algo habitual. Decimos “era” porque, al ritmo que va la crisis climática, la gran mayoría de los científicos del clima ya dan por hecho que lo veremos. Y que puede ocurrir, apuntan, mucho antes de finales de siglo.
Los 2 grados permanentes, para 2050, y esta misma década el 1,5
“Los 2 grados de forma continua los habremos alcanzado de aquí a mediados de siglo”, advierte el climatólogo de la Universidad de Alicante Jorge Olcina. Actualmente, ya estamos en un aumento de temperatura media global de más de 1,2 grados. “Los últimos datos (Oct 23) apuntan a que ya estamos en 1.25ºC”, constata en sus redes el físico de la AEMET Juan Jesús González Alemán, que califica lo ocurrido el viernes y el sábado de “hito climático”.
Los plazos se acortan porque el calentamiento global se está acelerando, como advierte de forma insistente la comunidad científica. “Llevamos ya algunos años en los que estamos cerca de ese límite. La tendencia a la subida de temperaturas se viene manifestando de forma preocupantemente acelerada desde el año 2010”, explica Olcina.
El meteorólogo de Meteored Francisco Martín advierte de que antes de que acabe esta década ya rebasaremos la barrera de 1,5 grados. “Posiblemente se supere en esta década, algún año, y de forma continua durante un largo periodo, no de forma puntual como ahora”.
Recuerda Martín que la propia Organización Meteorológica Mundial (OMM) viene alertando de que “la llegada mantenida a esa anomalía de 1,5 grados (de aumento de la temperatura global) posiblemente se alcance en esta década, antes de 2030”, y explica que “las previsiones de los modelos climáticos van en esa misma línea”.
Emisiones en ascenso y un Niño por llegar
Este “hito climático” llega cuando acabamos de conocer que las emisiones de CO2, lejos de disminuir, han batido nuevo récord el año pasado. “En 2022, las concentraciones de gases de efecto invernadero han alcanzado de nuevo un máximo histórico en los registros modernos”, advierte Martín. Y ese “aumento constante de los gases de efecto invernadero” implica que “la capacidad de almacenar calor en la atmósfera, y sobre todo en los mares, es cada vez mayor”.
Pero tanto él como Olcina apuntan más causas que pueden estar detrás de lo ocurrido. Y que sugieren que lo peor todavía está por llegar. Porque este récord climático que se acaba de registrar ocurre antes de que El Niño haga su entrada en escena, en estas latitudes. “El Niño tendrá su pico a finales de 2023 y comienzo de 2024”, advierte Martín.
“El fenómeno de El Niño puede ser bastante intenso en 2024”, coincide Olcina. Y apunta que el año que viene “volveremos a batir ese récord (de los 2 grados), pero seguramente antes y durante más días al año”. Martín advierte de lo mismo: “No es de extrañar que esta anomalía ocurra más en los próximos meses, y en los próximos años”.
Pero hay más factores que los científicos creen que están contribuyendo a acelerar el calentamiento global. Martín recuerda que también es importante “la disminución de los aerosoles generados por el ser humano, particularmente en los barcos, que son grades emisores”. Es lo que se llama “shock por terminación de aerosoles”, que les explicábamos hace unos meses.
“Al no haber esos aerosoles, la atmósfera es más transparente a la radiación solar y tiene más capacidad de absorber la energía solar y retenerla”, explica Martín. Pero es que, además, esa radiación solar también está aumentando. “Llevamos dos años con la actividad solar en crecimiento. Y esa llegada de más radiación solar va a sumar más decimas de grado al calentamiento”, advierte Olcina.
El calentamiento se acelera: ¿noviembre desbancará a septiembre?
De momento, los científicos ya tienen claro que este 2023 batirá todos los récords de temperatura: será el año más cálido en el planeta desde que hay registros. “En 2023 se han alineado un conjunto de factores que hacen que las anomalías de temperaturas sean muy altas. Esto lo padecemos desde el verano, y se ha agudizado en septiembre y octubre”, explican.
Septiembre supuso “un salto sin precedentes” en la escalada de la temperatura del planeta. Y algunos científicos ya apuntan que noviembre puede incluso desbancarlo. “La subida de los últimos días es brutal. Noviembre apunta a quitar el protagonismo al pasado septiembre”, advierte en sus redes sociales Juan Jesús González Alemán.
“El balance energético terrestre está completamente desequilibrado”, resume Francisco Martín. Eso quiere decir que la Tierra almacena mucha más cantidad de energía de la que libera. ¿Qué implicaciones tiene esto? “Ya lo estamos viendo: un aumento de las temperaturas constante”. Y que, de momento, parece imparable.