La marea virtual para retrasar la edad del primer móvil se extiende. Padres valencianos lanzaron una iniciativa en change.org para acabar con su uso en los colegios e institutos hasta 2º de la ESO y en Cataluña, la Conselleria de Educació de la Generalitat ya ha impulsado un proceso participativo para regular su uso a partir de 2024. No son los únicos, otra petición en la misma plataforma lleva ya más de 40.000 firmas. Reclaman la aprobación de una ley para prohibir el uso de este dispositivo antes de los dieciséis años, edad en la que finaliza la Enseñanza Secundaria Obligatoria, y en la que "la mayoría de expertos asignan un cambio madurativo en los adolescentes".
La petición, recogida por Europa Press, ha sido iniciada por Natàlia Jiménez León, profesora y madre de dos hijos, uno de ocho años y otro de once años. "El mayor tiene compañeros de clase en su escuela que ya poseen teléfono móvil y me pregunta con frecuencia cuándo podré tener uno", señala la docente.
Como profesora de Secundaria, Jiménez León relata que observa a diario la "adicción" que los adolescentes desarrollan hacia los dispositivos electrónicos, algo que, a su juicio, "repercute en su concentración y atención de forma significativa".
En este contexto, asegura que, cada vez más, los docentes observan cómo los adolescentes en el aula "desconectan rápidamente si las instrucciones o explicaciones no son muy cortas, o si no hay un cambio constante de dinámica". "Cada vez más tienen problemas para comprender lo que se les pide en un enunciado de un ejercicio, a menudo porque no llegan a leerlo hasta el final, pues lo encuentran demasiado largo", precisa.
Para la profesora, el uso excesivo del teléfono móvil "puede tener consecuencias perjudiciales para la salud física y mental de los niños". Así, señala que, según un estudio publicado en el Journal of the American Medical Association (JAMA), el uso excesivo del teléfono móvil "puede causar problemas como falta de sueño, estrés e incluso depresión en los jóvenes".
Esta petición no se refiere únicamente a la prohibición de llevar el dispositivo móvil al centro escolar, puesto que en la mayoría de estos centros "ya existe una regulación estricta y prohibición del uso del teléfono por parte de los alumnos", sino que reclama "una prohibición total".
La madre y profesora considera que esta medida "podría ayudar a prevenir problemas relacionados con la salud mental y física" en los jóvenes y permitirles "disfrutar plenamente su infancia y adolescencia sin las presiones asociadas con estos dispositivos". "Por favor, firma y comparte esta petición si estás acuerdo con esta propuesta para proteger a nuestros hijos e hijas", concluye.
En la misma línea, Ángela Sánchez-Pérez Merino, también docente, ha lanzado otra petición en la misma plataforma, que acumula casi 1.500 firmas, para que se apruebe una ley que prohíba el uso de los smartphones hasta los catorce años.
La profesora explica que ve a diario cómo los niños "se ven afectados de manera negativa por el uso inadecuado de dispositivos móviles con acceso a Internet".
"Si los dirigentes políticos no ponen solución a esta situación este problema irá creciendo cada vez más. Estamos viendo un uso descontrolado de redes sociales y contenidos de Internet inadecuados para niños", alerta Sánchez-Pérez Merino.
La docente nota las consecuencias negativas del uso de estos dispositivos en los niños en un "déficit de atención y somnolencia en horario lectivo".
"Es el momento de pararlo ya. Con un teléfono móvil para solo llamar es suficiente. Hay relojes para sólo llamar y con localización GPS. Pedimos una ley que prohíba el uso hasta los catorce años", concluye la petición.