Canarias continúa sufriendo una insoportable presión migratoria. Si el sábado pasado fueron 430 las personas rescatadas en menos de 24 horas y, al día siguiente, ese número ascendió a más de 450 que iban en ocho embarcaciones, este 21 de octubre se ha batido todo un récord. Triste, por supuesto.
Más de 1.000 migrantes han llegado en seis cayucos durante este sábado a las costas del archipiélago, con 320 en una sola embarcación. Esta última, entre cuyos ocupantes había varios niños y menores, ha sido recibida en el puerto de La Restinga, en la isla de El Hierro. Se trata de la más numerosa de las que se tiene constancia desde que se abrió la denominada ruta canaria de las pateras en 1994.
Tan sólo en este mes de octubre han desembarcado en Canarias más de 10.000 personas. En caso de seguir a este ritmo, 2023 podría convertirse en el año con más llegadas de migrantes desde la crisis de los cayucos que tuvo lugar en 2006.