La Policía Nacional ha encontrado una cantidad significante de cocaína y armas blancas ensangrentadas en el domicilio en el que presuntamente ocurrió el asesinato de un hombre durante la madrugada de este viernes en la pedanía ilicitana de El Altet. Por otra parte, también en Alicante, un hombre ha sido condenado por forzar a su nieta a masturbarle cuando era una niña.
El cuerpo policial ha explicado que los agentes ya han realizado una inspección ocular a la vivienda, de la que han intervenido algunos objetos, tras la detención de un hombre de nacionalidad colombiana acusado de matar de varias puñaladas a otro.
Han destacado, asimismo, que el presunto autor, un varón de nacionalidad colombiana y 41 años, permanecerá en dependencias de la Policía Nacional hasta su puesta a disposición judicial, que se llevará a cabo cuando finalice la investigación.
El Juzgado de Instrucción en funciones de guardia ha incoado diligencias previas que además ha declarado secretas, motivo por el que, han expuesto, no aportarán más información desde el cuerpo policial.
El crimen ocurrió en torno a las 3:00 horas en un domicilio de la calle Balandro de El Altet, en circunstancias que aún se investigan aunque la víctima mortal, un español, presentaba al menos tres incisiones, una de ellas cerca del corazón.
El apuñalado pudo llegar malherido hasta una gasolinera cercana antes de fallecer, posiblemente desangrado, y el personal de la estación de servicio dio aviso a los servicios de emergencia, que no tuvieron éxito en las maniobras de reanimación pulmonar (RCP).
Una dotación de la policía local de Elche que se hallaba en las inmediaciones siguió el rastro de sangre y detuvo al presunto autor de los hechos en las proximidades de la vivienda donde, supuestamente, ocurrió el homicidio.
La Policía Nacional se ha hecho cargo de las investigaciones y está a la espera del resultado de la autopsia para arrojar más luz en torno al crimen, del que un juzgado ha decretado el secreto de las actuaciones, sin que haya trascendido la relación que había entre la víctima mortal y el presunto agresor ni el posible móvil.