Tras una investigación de dos meses, la Policía de la isla de Phangan (en el sur de Tailandia) mantiene los cargos que presentaron para el arresto de Daniel Sancho el 7 de agosto. Le acusan del asesinato premeditado y ocultación del cuerpo de Edwin Arrieta Arteaga.
Así consta en el informe final de la investigación que han entregado el lunes a la Fiscalía, según han indicado fuentes policiales a EFE. Este informe es el final de la investigación policial del crimen presuntamente cometido por el hijo del actor Rodolfo Sancho.
La Policía de la isla de Phangan ha mantenido los cargos que presentaron el 7 de agosto, cuando el chef pasó a disposición judicial e ingresó en prisión provisional, dos días después de su detención por un crimen que él mismo confesó haber cometido el 2 de agosto.
A partir de ahora, la Fiscalía tiene que realizar su informe y entregarlo ante el tribunal de Samui antes del 28 de octubre. Entonces, el juez fijará una fecha para el juicio. Para entonces, Daniel Sancho tendrá que tener un abogado tailandés y si no, se le asignará uno de oficio, después de que el 7 de septiembre su padre prescindiese de Anan Chuayprabat (Kunh Anan) por "discrepancias".
En este juicio, el hijo del conocido actor podría ser condenado a pena capital o cadena perpetua, aseguró la cara visible de la investigación judicial, Surachate Hakparn, conocido por el alias de 'Big Joke'.
Cabe destacar que este está siendo investigado por presuntos pagos a varios periodistas a cambio de que cubriesen determinadas informaciones, en plenas investigaciones contra él por su presunta implicación en una red de sobornos. No obstante, las autoridades tailandesas han explicado que esto no tiene impacto en el caso de Daniel Sancho.
Surachate ha explicado en una entrevista emitida en Internet que pagaba 10.000 bahts (cerca de 260 euros) a cuatro periodistas con los que tenía relación y que, según sus propias palabras, tenían sueldos bajos, informa el periódico 'Bangkok Post'. "Soy generoso (...) Lo he sido desde que soy inspector", ha dicho, explicando que, con el dinero, pretendía cubrir los gastos de desplazamiento o comidas de los periodistas cuando tenían que viajar.
"El dinero era mío y no de casas de apuestas", ha añadido, precisamente después de que esta semana fuese señalado por presuntamente participar en una red de sobornos de este tipo de empresas. Tailandia prohíbe todo juego de azar.
La generosidad a la que alude 'Big Joke' también se habría extendido a su propio equipo, ya que estima que se ha gastado en él 1,5 millones de bahts (casi 39.000) euros de su propio bolsillo o, en concreto, del de su mujer, hija de un magnate vinculado al mundo inmobiliario y del transporte.