Un cabo y cinco agentes de los Mossos d'Esquadra han aceptado ser condenados a un año de cárcel, que no cumplirán, y seis meses de inhabilitación tras haber golpeado, escupido y amedrentado con un disparo al aire a un joven negro en Manresa (Barcelona), en el mes de enero de 2019, tras haberle proferido insultos racistas como "mono" o "mierda humana". Hace unas semanas, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) avaló la absolución de un hombre que agredió verbalmente a una empleada de un establecimiento usando expresiones como "negra de mierda" o "puta negra".
Los agentes de Policía, para quienes la Fiscalía había pedido en un principio tres años y medio de cárcel, habrían acordado con las acusaciones, la defensa particular que ejerce SOS Racisme y la Fiscalía, una sentencia de conformidad.
Con este acuerdo, los seis Mossos reconocieron los hechos por los que habían sido acusados: acudieron a un piso ocupado, encontraron al denunciante y "movidos por un profundo desprecio y animadversión hacia su color de piel, lo empujaron y escupieron, a continuación lo propinaron golpes en la cabeza y patadas en los costados, mientras le lanzaban bolsas de basura y le espetaban insultos de índole racista".
Uno de los agentes lanzó un disparo al aire para amedrentarlo y le dijo: "He fallado, si no, te reviento. ¡Te he disparado, eh!"; luego le detuvieron por un presunto delito contra la salud pública y, estando esposado, le siguieron golpeando e insultando.
Al tratarse de una condena que no supera los dos años de cárcel, y al no tener los agentes de Policía antecedentes, podrán evitar una pena privativa de libertad a condición de que participen en un programa de igualdad de trato y no discriminación y que no reincidan en los próximos tres años.
Asimismo, se les impedirá acercarse a menos de 500 metros de la víctima durante cuatro años, tras haber ser condenados "in voce" por la Audiencia de Barcelona.
Esta sentencia contempla una multa de 300 euros y una indemnización para la víctima, Wubi, de 80.000 euros, por daños morales y lesiones. De esta cantidad responderá la Generalitat como responsable civil subsidiaria.
Al cerrar el acuerdo, se ha tenido en cuenta como atenuante para los seis policías que entre todos ya han consignado 30.000 euros como adelanto para la indemnización de la víctima.