Un cigarrillo pudo ser la causa de la tragedia en la residencia de Leceñes, con una muerta y 27 heridos

La investigación del incendio en el geriátrico de Leceñes, Asturias, sigue abierta. Todo apunta a un cigarrillo mal apagado. De los 27 heridos, solo quedan cinco ingresados en diversos hospitales. La más grave, una trabajadora del centro.

Además, de los 27 ingresados iniciales, muchos por inhalación de humo, una mujer de 76 años falleció en el incendio de la residencia de mayores. Su habitación quedó completamente calcinada y aunque las llamas no se extendieron mucho más allá el humo invadió rápidamente la primera planta del edificio.

Un cigarrillo sin apagar

Se baraja la posibilidad de que la fallecida, que era fumadora habitual, se quedara dormida con un cigarro encendido. Hipótesis aún por confirmar por los bomberos.

Solo quedan cinco personas hospitalizadas en distintos centros de Asturias. La más grave es una trabajadora del geriátrico de 46 años. Habría entrado en la habitación donde se originó el fuego, según cuenta el diario El Comercio, inhalando gran cantidad de humo. Permanece en la UCI.

Los ancianos que vivían en el edificio incendiado de la residencia de Leceñes están siendo reubicados en otros centros.

Los 74 residentes que viven en el otro edificio con el que cuenta la residencia, que no se vio afectado por el incendio, siguen allí, tratando de recuperar la normalidad.