Cinco bomberos forestales de la Generalitat Valenciana están llevando a cabo misiones humanitarias en Marruecos, tras la catástrofe por el terremoto que tuvo lugar la semana pasada en Marrakech, y en Libia, a raíz de las inundaciones provocadas por el temporal Daniel. Una de las últimas tareas realizadas ha sido el rescate de una niña de nueve años que se encontraba bajo las ruinas.
Según los responsables del proyecto, se está reforzando el trabajo de los dispositivos locales, especialmente en zonas de aldeas inhóspitas que se encuentran incomunicadas. Una de las últimas tareas realizadas ha sido el rescate la pasada noche de una niña de nueve años que se encontraba bajo las ruinas.
"Después de mucho pelear, tras pasar 18 horas despejando 15 metros cúbicos de tierra y piedras, hemos conseguido sacarla viva. Será difícil olvidar la imagen desgarradora del rescate de niña enrollada en una manta, junto con la alegría y celebración de su familia por recuperarla", ha relatado Edgar Xavier Juan, uno de los voluntarios.
Rafael Lisa, miembro de la Unidad helitransportada de Mutxamel se ha sumado al equipo de rescate de la asociación GEA España y los voluntarios de la Unidad de Respuesta en Incendios Forestales URIF Internacional Edgar Xavier Juan (Castelló de Rugat) e Iván Jordá (Unidad helitransportada de Cocoll) están participando junto a Manuel Ruiz (unidad de Castelló), de Bombers pel Món, en un dispositivo de ayuda.
Todos ellos, junto con otros 13 voluntarios de diferentes organizaciones, realizarán tareas de rescate y salvamento hasta el 15 de septiembre, según ha informado la Generalitat en un comunicado. Para llevar a cabo las intervenciones los bomberos forestales participan en grupos de los que forman parte junto a médicos, enfermeros, voluntarios de ONG y efectivos de otros cuerpos.
Paralelamente, esta madrugada, Xevi Bolumar (unidad de Xérica) ha despegado rumbo a Libia junto con cinco voluntarios más de Bombers pel Món, con el fin de realizar tareas de rescate tras las devastadoras inundaciones que han dejado más de 5.000 personas desaparecidas.
Para facilitar que puedan llevar a cabo esta misión, desde la Sociedad Valenciana de Gestión Integral de los Servicios de Emergencias (SGISE) se ha concedido permisos retribuidos a los trabajadores que lo han solicitado, y se les ha autorizado el traslado y uso de los EPI.