Condenado a prisión permanente revisable por asesinar a una mujer con discapacidad para robarle en Benidorm

Un hombre de 62 años ha sido condenado a prisión permanente revisable por matar en Benidorm (Alicante) a una mujer en situación de especial vulnerabilidad, que sufría una enfermedad que la obligaba a usar una silla de ruedas.

La sentencia de la Audiencia Provincial de Alicante ha considerado probado que el asesino robó el dinero que la víctima guardaba en una caja fuerte en su casa de Benidorm; para acceder a este, el condenado instaló una cámara de vigilancia en el domicilio de la mujer y así tener acceso a su contraseña. Por esto, los jueces han añadido otros tres años de prisión por un segundo delito de descubrimiento y revelación de secretos en concurso con uno de robo con fuerza en casa habitada.

El condenado habría contado con la colaboración de su esposa, también condenada a 3 años de privación de libertad al considerarla coautora del delito de descubrimiento de secretos, y le añade otros seis meses de prisión por un segundo delito de encubrimiento respecto al asesinato cometido por su marido.

Los dos procesados habían sido condenados inicialmente a prisión permanente revisable en un primer juicio con jurado popular celebrado en 2022 que les consideró coautores de la muerte de la mujer con discapacidad, pero tras un recurso de apelación, el Tribunal Superior de Justicia valenciano (TSJCV) anuló en febrero de 2023 esa primera sentencia porque el objeto del veredicto entregado al jurado adolecía de defectos, ya que solo pudieron valorar hechos desfavorables para los procesados.

La sentencia dictada ahora por la Audiencia tras la repetición del juicio con un jurado distinto mantiene la misma pena de prisión permanente revisable para el procesado, pero exculpa a su mujer del delito de asesinato.

Asfixió a la mujer con discapacidad para robarle el dinero que guardaba en su casa de Benidorm

Los hechos sucedieron en el 14 de junio de 2020 en el domicilio de la víctima en Benidorm a donde, según el jurado, los dos procesados se desplazaron desde Adrall (Lleida) en dos vehículos distintos con la intención de robar a la mujer, con la que mantenían una relación de amistad entablada cinco años atrás, hasta el punto de que el acusado llegó a realizar tareas de asistencia a la víctima, asumiendo trabajos de mantenimiento en su vivienda.

El jurado consideró probado que la pareja se puso de acuerdo para apropiarse de los bienes guardados en la caja fuerte de la víctima tras instalar una cámara de vigilancia con el objetivo de descubrir la combinación que permitiese abrirla, y han concluido que el hombre la golpeó por la espalda, sin que la víctima tuviera capacidad de defensa, y que después volcó la silla de ruedas eléctrica y que esa última acción fue la que provocó la muerte por asfixia por la compresión que ejercía el peso sobre la espalda.

La esposa esperó a su marido fuera de la casa y no se enteró de la muerte hasta una vez ocurrida, por lo que “no actuó como cómplice” para matar a la víctima sino que “en todo caso le encubrió en base a su relación de pareja", según una sentencia que rechaza indemnizar a los tres hermanos de la fallecida con 48.000 euros porque estos no tenían ninguna relación desde hacía más de 20 años.