El pasado fin de semana un accidente de tráfico dejó dos muertos y siete heridos, uno de ellos un bebé en Lugo. Dos coches colisionaron de frente. Los ocupantes de uno de los coches trataban de evitar un suicidio.
En uno de los coches del accidente de Lugo iban cuatro personas que en el momento del siniestro iban hablando con la Policía. Trataban de evitar un suicidio. Seguían a una persona que iba andando por la calle ensangrentada, informa el diario El Progreso.
Mientras hablaban con los agentes, el otro vehículo se les habría venido encima. En el otro coche iban cinco personas.
Los fallecidos son Antonio Pumariega Núñez, de 95 años, y su hija María Teresa Pumariega Flores, de 68, que iban en el coche que invadió el sentido contrario. El conductor de este coche permanece hospitalizado con lesiones de consideración. Los otros dos heridos de este coche, una mujer de 65 años que es hija y hermana de los fallecidos y otro hombre de 68.
En el otro coche, iban además del bebé, que fue dado de alta al día siguiente del accidente gracias a que estaba perfectamente sujeto en la silla reglamentaria, y su madre, la conductora, otros dos jóvenes, de 23 y 24 años, que necesitaron atención en el hospital. La conductora ha tenido que ser intervenida en el fémur pero está fuera de peligro.