Los amantes de los animales a menudo se topan con dificultades para disfrutar de sus mascotas debido a las pequeñas dimensiones del piso en el que viven. Es más, incluso en algunos de mayor tamaño tampoco encuentran ni el espacio ni las condiciones adecuadas para ello. Esto no significa que no puedan tenerlas, ya que hay mascotas ideales para tener en un piso.
A pesar de lo que pueda parecer, hay animales de compañía que pueden ser felices en un piso, aunque este sea de pequeño tamaño. A continuación apuntamos las mascotas ideales para estos entornos.
Perros. No cabe duda de que el perro es el animal de compañía más popular. No en vano se le conoce como el mejor amigo del ser humano debido a la fidelidad que muestra con sus dueños. Sin embargo, no todas las razas se adaptan del mismo modo a la convivencia en un espacio reducido como un piso. De hecho, las más adecuadas son las de pequeño tamaño: carlino, bulldog francés e inglés, bichón maltés, yorkshire terrier, border collie, chihuahua, etc. En la web de Affinity Gabriella Tami, doctorada en Veterinaria y Máster en Etología, lo explica del siguiente modo: “Los perros grandes disfrutarán en un espacio donde poder moverse a sus anchas y descansar tranquilamente cuando lo necesiten. Mientras que, incluso en un apartamento pequeño, los perros más diminutos parecerán unos verdaderos aventureros debido a su tamaño, aunque hay algunos perros grandes –como los Galgos–, que por su tranquilo talante, también se adaptan bastante bien a espacios reducidos”. No obstante, esta especialista apunta que no solo el tamaño del piso es importante, sino la actividad: “si eres la típica persona que se lleva a todos lados a su perro y solo paráis por casa para dormir, incluso un perro activo puede adaptarse a un apartamento. Cuando llegue a casa, estará tan cansado que solo querrá descansar”.
Gatos. Son los segundos en popularidad, aunque cada vez les van más a la zaga, pues se han ganado el corazón de muchas personas, a pesar de que no suelen mostrarse tan cariñosos como los caninos. A su favor juega un tamaño menor, que se suelen conformar con disfrutar en un espacio reducido (donde estarán descansando la mayor parte del tiempo) y que son bastante higiénicos (siempre defecan y orinan en su caja y ellos mismo cuidan su limpieza).
Roedores. Los más habituales en este apartado son los hámsters. Son muy sencillos de cuidar, tienen un tamaño pequeño y no tienden a escaparse. De hecho, no son demasiado rápidos y se conforman con vivir en su pequeño refugio.
Conejos. Los conejos no son considerados animales domésticos, pero sí que se pueden convertir en una mascota muy cariñosa. Eso sí, habrá que tener cuidado con el área en el que se mueven, pues son capaces de roer cualquier cosa para frenar el crecimiento continuo de sus dientes.
Peces. Otras mascotas ideales para tener en casa son los peces de agua dulce que pululan por una pecera o acuario –un elemento que puede ser muy decorativo–.