Cientos de millones de personas en alerta por calor extremo. En todo el planeta. Y ambas cosas, el “calor extremo” y que afecte a "todo el planeta”, están ocurriendo a la vez. Los termómetros están batiendo, o a punto de batir, récords históricos: en Europa, en EE.UU., en Asia. En un planeta en el que los océanos siguen calentándose, con temperaturas que rebasan todas las líneas rojas conocidas hasta ahora. Y lo peor es que estamos en julio, queda casi todo el verano por delante...
¿Qué nos queda por ver? ¿Veremos superar esos 54,4 grados centígrados que marcan la máxima histórica en el planeta? Se registró en el Valle de la Muerte, EE.UU. en los veranos de 2020 y 2021. El domingo llegó a los 53,3 y en la noche del lunes, a la una de la madrugada, había 49 grados. La intensa, extensa y extrema ola de calor que azota América del Norte estos días no permite descartar un récord.
“El récord medido de manera confiable en el Centro de Visitantes de Furnace Creek, en el Valle de la Muerte, son 54,4 grados. Y no es descartable que se pueda batir estos días”, advierte el meteorólogo Rubén del Campo. Pero es que “estamos en un contexto en el que batir récords de temperatura en una parte y otra del planeta no nos debe extrañar”, explica el climatólogo Jorge Olcina.
“Entra dentro de lo lógico en un proceso de calentamiento global. Si no se bate este año, será el que viene, o el siguiente. Porque la atmósfera y los océanos se siguen calentando” año tras año. Registrar récords de temperatura, advierte Olcina, “se va a convertir en una costumbre”.
El mes de julio comenzaba fuerte. El día 6, el planeta batió su récord histórico de temperatura media global. Y no fue algo puntual. Porque todos los días de esa semana, todos, se registraron temperaturas medias superiores a los 17 grados: una barrera que no se había superado jamás en el planeta.
En ese escenario, y con el verano aún comenzando, ya muchos advertían de que esos récords podían ser superados, según vaya avanzando esta estación en el hemisferio norte. “Es posible que veamos algunos días aún más cálidos durante las próximas seis semanas”, advertía el experto en cambio climático de la Universidad de Berkeley (EE.UU.) Robert Rohde.
Pues el verano ha ido avanzando, y los termómetros siguen subiendo. Esta semana está siendo insólita en todo el hemisferio norte. “La ola de calor que ocurrirá la próxima semana en el sur de los EE.UU. será histórica”, advertía hace unos días el experto en datos del clima Eliot Jacobson. Ya lo es.
De momento, este domingo, el Valle de la Muerte marcó la temperatura más alta registrada en el mundo durante este año 2023: 53,3 grados centígrados. Todavía está un grado por debajo de los 54,4 grados de julio de 2021. Pero a esa ola de calor que afecta al suroeste de EE.UU. (más de 100 millones de personas) todavía le quedan unos días por delante.
A la espera de ver si el termómetro llega a los 55 grados en EE.UU., en Asia, mientras, ya se han batido récords. El domingo, la ciudad de Sanbao, al noroeste de China, alcanzó los 52,2 grados centígrados. El récord anterior, en esa misma estación, era de 50,6 grados centígrados, registrados en julio de 2017, según informa la agencia meteorológica china.
Las autoridades locales han pedido a la población que se quede en casa, que no salgan ni a trabajar, y estos días hay vehículos rociando con agua las calles de la ciudad. El Gobierno chino había estado avisando ya sobre las "condiciones climáticas extremas" que se preveían este verano, y los "múltiples desastres naturales" a los que se puede enfrentar el gigante asiático.
Para Europa, el panorama que pintan los meteorólogos no es mucho mejor. Este lunes ya ha sido tremendo en el sur del continente. Y lo peor de esta ola de calor se espera para el miércoles.
Todos los ojos están puestos en Italia, porque esta semana se pueden superar los 47 grados en Cerdeña, es decir, los termómetros pueden estar muy cerca de la temperatura más alta jamás registrada en Europa: 48,8 grados en Sicilia, en agosto de 2021. Allí, el consejo del Gobierno es el mismo que en China: no salir a la calle estos días e hidratarse bien.
Este mapa interactivo de la Met Office británica resume muy bien la situación que está viviendo el planeta estos días.
“Esto confirma que el cambio climático incrementa los fenómenos extremos. Y lo que estamos viendo estos días es que se producen simultáneamente en muchas partes del mundo. Se batan o no récords, el cambio climático era esto, esta es su aplicación práctica”, constata Del Campo.
En esa misma idea insiste el Secretario General de la OMS, que lanzaba un tuit de urgencia este lunes, a la vista de la situación: "La crisis climática no es una advertencia. Está sucediendo. Insto a los líderes mundiales a ACTUAR ahora".
El hecho es que, al coincidir estas máximas de récord en varios puntos del planeta en la misma semana, el calor extremo está siendo más llamativo. Pero para quienes llevan años advirtiendo de ello, no es sorprendente. “Antes de que llegaran estos efectos tan claros, poníamos esas gráficas y ya se veía que venían fenómenos más frecuentes y más intensos. Pues esto es lo que estamos viendo estos días”, explica Del Campo.
Pero no es sólo que se registren máximas insólitas estos días, es que están llegando antes de lo que suele ser habitual. Vean.
"Quedan dos semanas más por delante de calentamiento", advierte Simons, porque aún acabamos de entrar en la canícula, el período más cálido del año, que en el hemisferio norte va del 15 de julio al 15 de agosto. El calor acumulado en el mar y la superficie terrestre va calentando el aire, y en estas fechas, "devuelven ese calor almacenado a la atmósfera”.
Pero lo que está ocurriendo este año, en general, y estos días en concreto, tiene su explicación en el mar. No hay más que mirar a los océanos, nos recuerdan los climatólogos: con unas aguas que están más calientes que nunca, y que empezaron a calentarse más pronto que nunca. Ya en abril les contábamos que habían superado todos los récords y que ello abría un escenario “desconocido” climatológicamente hablando. Ahora lo estamos comprobando.
Un ejemplo, el que nos toca más de cerca: el Mediterráneo. “Yo, lo que destacaría de este verano es que el Mediterráneo ha alcanzado temperaturas muy altas muy temprano”, subraya Olcina. Hay ya 28 grados en varios puntos, frente a las costas de la Comunidad Valenciana o Baleares. “Llegaremos a los 29, 30 en próximas semanas”, advierte. Porque “conforme se sigan sucediendo estas olas de calor, se irá acumulando más calor en el agua del mar”.
Es uno de los efectos del calentamiento global, que nos afecta, y mucho, en España. “El Mediterráneo cada vez se calienta más y cada vez se prolonga más esa temporada con el agua más caliente. Antes, había que esperar a finales de agosto para ver los 28 grados de esta semana, ahora desde mediados de julio ya los tenemos, eso es lo preocupante”, insiste Olcina.
También Del Campo llama la atención sobre esto. “¿Qué está pasando este año? Que tenemos las aguas del mar más cálidas que nunca. Aquí, en el Mediterráneo, por ejemplo, están 4 grados por encima de lo normal”.
Y además de todo esto, recuerda el portavoz de la AEMET, está “el fenómeno de El Niño, que tira todavía más hacia arriba de la temperatura”. Aunque advierte que es sólo una vuelta de tuerca más en esa tendencia de calentamiento antropogénico, “no es lo mismo un Niño en los 90 que ahora, con una temperatura del planeta tan alta”. Ya está claro que 2023 y 2024 serás los años más cálidos registrados nunca en la Tierra, recuerda el meteorólogo.
De momento, estamos a mediados de julio y “queda mucho verano por delante, queda calor en el hemisferio norte”, advierte Del Campo. Y no sólo en verano. Fíjense en este mapa, que es la predicción para agosto, septiembre y octubre. El rojo oscuro indica "más calor de lo normal".
Es la previsión de hace unos días del satélite Copernicus, y es "muy robusta”, según Del campo. Lo que se ve es que “la mayor parte de los continentes van a tener una temperatura por encima de lo normal durante los tres próximos meses”, octubre incluído. “El trimestre será más cálido de lo normal en prácticamente todo el planeta”.
En cuanto a las próximas semanas, el meteorólogo confirma que “el verano todavía nos puede traer nuevas olas de calor, en España y en otras zonas del hemisferio norte”. Donde es probable que se sigan batiendo récords de máximas.
"Lo mas preocupante nos es que se batan estos récords", advierte Olcina, "sino que se acumule tanto calor en el agua del mar, que va a mantener durante mucho más tiempo el proceso de calentamiento". Recuerda el climatólogo de la Universidad de Alicante que, "con el calor acumulado ya en los océanos, aunque dejásemos de emitir gases contaminantes, el mantenimiento del calor en la atmósfera se prolongaría una década más, como mínimo".
Olcina es muy claro al respecto: "Tenemos calentamiento asegurado prácticamente durante todo este siglo, lamentablemente va a ser así. Porque no conseguimos frenar emisiones y el calor, tanto del aire como del agua del mar, siguen en ascenso". También Del Campo va más allá de lo que estamos viendo esta semana. "Mas allá de esto, vamos a seguir viendo récords de temperatura, mensuales y anuales. Con los escenarios actuales de emisiones, nos vamos a final de siglo con un calentamiento probable de 3 grados".