Consternación por la muerte de dos jóvenes después de que su coche fuera arrollado por un tren en Lugo en un paso a nivel sin barreras. Los vecinos de la zona se han concentrado para mostrar su indignación por el fallecimiento de los chicos, de 19 y 21 años.
Ambos perdieron la vida en un punto negro que, según denuncian los vecinos desde hace años, supone un peligro para cualquiera que lo atraviese. La abundante maleza a un lado y una caja metálica al otro impiden ver con claridad la llegada del tren.
Los vehículos se ven obligados a invadir la vía para tener un buen ángulo de visión: "Si tienes la suerte de que no viene el tren, te libras, y si viene pues pasa lo que pasa", ha apuntado un vecino. Son muchos los que cruzan a diario el fatídico paso a nivel de Lugo.
"Los vecinos de Recemil y de Coeo cruzamos todos los días por aquí jugándonos la vida", aseguran. Llevan décadas denunciando su peligrosidad. Sin semáforo, ni señal sonora, ni barrera: "No podemos permitir que muera más gente aqui porque no haya un semáforo".
Adif ha abierto una investigación sobre el accidente mortal. El conductor, de 19 años, perdió la vida horas después de que el copiloto, de 21, muriera en el acto, cuando el coche fue arrollado por el conoy a gran velocidad. El tercer jóven que viajaba en la parte de atrás del vehículo sigue ingresado en el UCI. Los tres regresaban a su casa del trabajo.