Margarina o mantequilla: ¿cuál es la mejor opción?
Aunque se suelen utilizar de manera similar, tienen importantes diferencias
El consumo de margarina o de mantequilla debe ser moderado al tener mucha grasa
Grasas saludables, vitales y beneficiosas para nuestro organismo
Son protagonistas habituales de muchos desayunos en los que están incluidas las tostadas. Hay pocos frigoríficos que no alberguen una tarrina de margarina o de mantequilla, o incluso las dos, pues son productos similares pero con muchas diferencias.
De hecho, tal es la similitud de su uso que no es de extrañar que surja la cuestión de cuál de ellas es mejor desde un punto de vista saludable. A fin de cuentas, habrá personas que prefieran el sabor de la mantequilla y otras que se decanten por el de margarina.
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Por lo tanto, a continuación vamos a exponer las principales características de estos dos alimentos –virtudes y defectos–, a partir de los cuales será más sencillo para cada persona determinar si la margarina es mejor que la mantequilla o viceversa.
Consumo limitado
Eso sí, antes de entrar en esos detalles, hay que exponer que ambos productos contienen un gran porcentaje de grasa, de manera que conviene limitar su consumo y no excederse. Y aunque puedan resultar nutritivos, no es recomendable tomar más de una cucharada al día, es decir, la cantidad que pueda repartirse en una o dos tostadas.
Grasas de origen vegetal vs. origen animal
La mantequilla es un producto natural hecho a partir de la grasa de la leche, lo que le aporta un sabor muy característico, mientras que la margarina se produce a partir de aceites vegetales. Esto provoca que, a pesar de tener unos altos porcentajes de grasa, el tipo sea diferente.
Por un lado, las grasas de la mantequilla suelen ser saturadas y además proporcionan colesterol a nuestro organismo. Asimismo, también incluye grasas saludables como el ácido linoleico y el ácido butírico.
Por su parte, la margarina se caracteriza por estar compuesta por grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, incidiendo en menor medida en dolencias cardiovasculares.
Minerales y vitaminas
Continuando con su composición, la mantequilla contiene más minerales, ya que proviene de la leche de un animal (vaca, oveja, cabra). Así pues, sus niveles de magnesio, de fósforo o de calcio son elevados. La margarina carece de estas propiedades, por lo que los fabricantes las añaden a modo de enriquecimiento del producto –no es de extrañar ver esa información en las tarrinas–.
Con las vitaminas sucede lo mismo, mientras que la mantequilla proporciona a quien la consume vitaminas A, D y E, la margarina solo proporciona E y K. Así que a la hora de producirla, también existe la opción de añadir complejos vitamínicos que las hagan más saludables.
Más o menos calorías
Como venimos apuntando, tanto la mantequilla como la margarina son muy calóricas. Es decir, aportan mucha energía y por ello hay que limitar su consumo para no acumular más grasas de lo normal. Así lo exponen desde la OCU: “La grasa de la mantequilla engorda exactamente lo mismo que la de la margarina. Por tanto, si los dos productos llevan el mismo porcentaje de grasa, engordan igual”.
Finalmente, la mantequilla se produce de una forma más natural, mientras que la margarina es un alimento ultra procesado, pues requiere una mayor elaboración. En definitiva, son dos productos muy similares pero de orígenes diferentes, con diferencias en los tipos de grasas que incorporan y en los minerales y vitaminas que aportan. Esto hace que sea el consumidor el que deba evaluar no solo su sabor, sino cuál de los dos le conviene más a su organismo.