Las cuatro jóvenes muertas en el accidente de tráfico de Collado Villalba serán enterradas hoy. Ayer todo el pueblo guardó un escalofriante minuto de silencio. Los padres de Erika, una de las menores fallecidas, se enteraron de la muerte de su hija, de 13 años, cuando fue a dar el pésame a la familia de la conductora.
Erika, de 13 años, había salido a las fiestas de Collado Villalba pero no se lo dijo a sus padres. Les contó que iba a dormir a casa de una amiga.
Por eso los padres de Erika no sabían que iba en el coche siniestrado. "¿Pero tú no sabes que tu hija iba en el coche?", le dijo la madre de la conductora a la de la menor de 13 años, según informa Vozpopuli.
Ella y sus dos amigas, de 15 y 16 años, perdieron el autobús en Collado Villalba para volver a su pueblo Moralzarzal. Así que llamaron a Polina, la hermana de 26 años de una de ellas.
La Guardia Civil sigue investigando el accidente de tráfico de Collado Villalba. Polina se despistó. Puede que se quedara dormida. Se descarta el exceso de velocidad.
Los investigadores esperan las pruebas toxicológicas pero todo apunta a que en ese despiste se salió de la vía y al dar un volantazo para volver a ella, se metió en el carril contrario, chocando con el coche de una guardia civil que iba a trabajar. La agente está fuera de peligro.