De confirmarse el crimen machista, Ana Vanessa, de 44 años, es la víctima número 21 por violencia de género este 2023, la segunda de Galicia. Su expareja, Víctor G. D, guardia civil, tenía una orden de alejamiento de 300 metros y la prohibición de comunicarse con ella, además de varias denuncias previas por violencia machista. Esto no bastó para evitar lo ocurrido. Su caso era considerado de "riesgo medio" y se habían realizado 56 intervenciones, según ha trasladado la subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Maica Larriba, a las puertas del camping en el que trabajaba Ana Vanessa.
La subdelegada del Gobierno ha explicado que la mujer había presentado denuncia el pasado mes de abril, lo que dio paso a un juicio rápido que concluyó con una sentencia de orden de alejamiento de 300 metros y prohibición de comunicación con la víctima. Tras esta sentencia, Larriba ha señalado que los agentes de la unidad de la Guardia Civil encargados de este tipo de casos intervinieron en un total de 56 ocasiones para proteger a la víctima, una de ellas "muy recientemente".
En todo caso, según ha explicado, esto no quiere decir que el agresor incumpliera esta pena, sino que se trata de "seguimiento de la víctima para constatar que la persona condenada no está quebrantando la condena". "Son seguimientos. No tienen que ver con los quebrantamientos. Es algo que se hace de manera normal, que forma parte de la protección", ha detallado.
Con todo, Larriba ha manifestado que "en ningún caso" la víctima "ha estado desamparada". "Todo lo contrario", ha afirmado antes de reconocer que "estas cosas suceden, lamentablemente". "Por muchos medios que pongamos, por muchos recursos...", ha lamentado.
El sábado, a las 16:10 horas, el presunto homicida esperó a que Ana Vanessa saliese de trabajar del camping O Muíño, situado en el lugar de Mougás, en el Ayuntamiento de Oia (Pontevedra), para terminar con su vida. Lo hizo, además, en presencia de niños. Horas después, sobre las 22:15 se , que suicidó tras verse acorralado por los agentes.
Ana Vanessa, que no tenía hijos, nació en A Coruña y después se trasladó a Lugo, ciudad que solía visitar con cierta frecuencia para ver a sus parientes. Vivía desde hacía un par de meses en Oia, donde empezó a trabajar en la limpieza del camping, tras separarse de su pareja, con el que había convivido en A Guarda.
En Oia, compartía vivienda con una vecina del municipio, que a tenor de lo ocurrido no ha querido hacer declaraciones, ha contado a la prensa la alcaldesa, Cristina Correa.
Allí, varios centenares de personas han guardado un minuto de silencio el domingo a mediodía en la entrada del camping. Los vecinos y vecinas, consternados ante este terrible crimen han depositado flores en la entrada de las instalaciones del camping, donde Ana Vanesa trabajaba y fue asesinada, y han mostrado su dolor e indignación por lo ocurrido.
También se ha guardado un minuto de silencio en el campo de fútbol de Oia, antes de la salida de la I Vuelta Ciclista al Baixo Miño, prueba de carácter nacional. Y el Ayuntamiento de A Guarda (Pontevedra) hará lo mismo el lunes a las doce en la Praza do Reló.
Además, en la localidad de Oia, las banderas ondean a media asta desde el sábado. La alcaldesa en funciones, Cristina Correa, ha dicho que "por desgracia estos casos pasan mucho más habitualmente de lo que cualquiera desearía. Nunca esperamos que pasen aquí, en un concello tranquilo".
Correa anunció el sábado que se decretarían tres días de luto oficial y que se suspenderían las actividades municipales programadas para esta jornada. La directora del camping, Beatriz González, ha señalado a los medios de comunicación que se trata de algo "muy triste y duro de afrontar", además de "totalmente inesperado". Sobre Ana Vanesa, ha señalado que se trataba de "una buena trabajadora", "muy sacrificada" y que siempre tenía "una sonrisa" y "sentido del humor".
El delegado del Gobierno en Galicia, José Ramón Gómez Besteiro, en su cuenta de Twitter ha lamentado el asesinato de Ana Vanessa, "la última víctima de un asesinato machista en Galicia", lo que considera "un fracaso como sociedad".
"No puede volver a suceder. No podemos callar ni dejar de avanzar para protegerlas", ha expuesto Besteiro en esa red social, en la que ha indicado que ya se le han remitido a la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género los datos e informes policiales relacionados con el caso.
El 016 atiende a todas las víctimas de violencia machista las 24 horas del día y en 52 idiomas diferentes, al igual que el correo 016-online@igualdad.gob.es; también se presta atención mediante WhatsApp a través del número 600000016, y los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10.
En una situación de emergencia, se puede llamar al 112 o a los teléfonos de la Policía Nacional (091) y de la Guardia Civil (062) y en caso de no poder llamar se puede recurrir a la aplicación ALERTCOPS, desde la que se envía una señal de alerta a la Policía con geolocalización.