Los vecinos del municipio malagueño de Periana celebran un rito ancestral este lunes: pasean a hombros a San Isidro Labrador y le tiran kilos y kilos de trigo para que la cosecha sea mejor el próximo año. Para esta curiosa celebración, que termina bien entrada la madrugada, se lanzarán hasta 48 toneladas de grano.
En la procesión no solo se cumple una festiva y solidaria tradición de dar trigo, también ruegan que se acabe pronto la sequía. A San Isidro Labrador no solo le piden salud, también que llegue esa ansiada lluvia. Las cosechas del olivar están absolutamente perdidas. Por ello claman al cielo. La procesión empezó sobre las 16:00 horas y acabará sobre las 04:00 del martes.
Cansados de mirar al cielo y que no caiga una gota, Periana, en plena Axarquia malageña, ruega a San Isidro labrador que mande agua. La localidad vive de la tierra: "La economía se basa en la agricultura". En esta época del año de la aceituna, la mitad de la cosecha "se ha perdido ya". Así que la ofrenda al Santo ha alcanzado las 42 toneladas de trigo que lanzan los vecinos desde los balcones.
Más o menos lo mismo les pasa a los vecinos de la localidad de Dueñas, en Valladolid: "Le pedimos agua". Y a la procesión se unen los agricultores: "Hay que pedir agua al Santo y a la Virgen de los Remedios y a quien sea", comenta una mujer. Este año, San Isidro Labrador tiene tarea por delante.