Nerea reclama a Osakidetza, el Servicio Vasco de Salud, una indemnización por haberle dado el alta cuando estaba de parto. Dos horas después de haber regresado a su casa, se puso de parto en el mismo portal. "Saliendo del portal noté como la cabeza ya estaba fuera", asegura la madre, que dice seguir "con el miedo en el cuerpo por el susto que pasé". La bebé permaneció trece días en la UCI con bronquiolitis, “sin duda causada por el frío” que había pasado al nacer, según costa en la denuncia.
La madre, de 25 años y gestante de su segundo embarazo, acudió al hospital bilbaíno de Basurto la madrugada del 4 de enero en la semana 38 del embarazo al sentir que tenía contracciones “fuertes y continuas” cada dos o tres minutos, y sospechar que estaba de parto, según recoge la denuncia registrada por la mujer, representada por el despacho de abogados Gómez Menchaca.
Llegó al hospital hacia las 2,30 horas, donde le colocaron durante media hora el cardiotocograma, que mide la frecuencia cardíaca del feto y las contracciones uterinas.
Después le mantuvieron dos horas más en observación pero sin monitorizar y la paciente notaba “cómo las contracciones van aumentando en cadencia e intensidad, por lo que requiere que la examine” un ginecólogo.
La especialista le examina a las 5:00 horas y, tras una ecografía, le da el alta “por entender que la dilatación se correspondía a 2 o 3 centímetros”. En ese momento, según explica la denuncia, la madre “tenía contracciones cada minuto”, pero no fue monitorizada de nuevo.
Al llegar al domicilio en la localidad vizcaína de Lemoa hacia las 6:00 horas, la mujer no pudo descansar y al comenzar a sangrar, decide regresar al hospital.
Sin embargo, en el ascensor de su portal “le asoma la cabeza de la niña” y tuvo que dar a luz allí mismo con la ayuda de su hermano que le iba a acompañar al centro sanitario y que llama al teléfono de emergencias 112 a las 7:15 horas.
A los 20 minutos acude una ambulancia no medicalizada con sanitarios “que no pueden hacer nada”, por lo que la madre y la recién nacida deben esperar en el portal hasta las 8:00 horas la llegada de una ambulancia medicalizada que las trasladó al hospital de Basurto, donde certificaron que la madre y la niña se encontraban bien.
Sin embargo, tres días después la pequeña tuvo que ingresar en la UCI con bronquiolitis, “sin duda causada por el frío” que había pasado en el portal tras su nacimiento, y tuvo que estar ingresada 13 días.
La madre ha denunciado “el impacto moral y psicológico de verse desatendida y de alumbrar a su hija en el portal”, y ha reprochado a Osakidetza por no haberla escuchado cuando explicaba que tenía contracciones cada minuto y “por no haber tenido la mínima precaución” de montorizarla antes de darle el alta.
Por ello, la mujer reclama al Servicio Vasco de Salud una indemnización por daños y perjuicios de unos 60.000 euros, en atención a ese daño moral y psicológico y también por el proceso curativo de la recién nacida, debido a la atención “deficiente” que ambas recibieron.