El padre de Julián Robles, el chico muerto en el incendio de un restaurante en Madrid, ha explicado a las puertas del local que supo que "algo malo" iba a pasar. La familia está pensando en denunciar a la empresa. Julián, o Nailuj –su nombre artístico- tenía por delante una prometedora carrera musical.
El día de su muerte, Julián salió del local a saludar a su tío que pasaba por allí. Este le hizo unas fotos a su sobrino, que le mandó a su hermano.
El padre de Julián ha explicado a las puertas del restaurante que cuando vio las fotos de su hijo sintió “algo, que algo malo iba a pasarle”, ha dicho entre sollozos.
El padre del joven, una promesa de la música, ha lamentado entre sollozos que llevaba mucho tiempo sin verle y que no ha podido despedirse de él. Ahora se plantean denunciar al local por negligencia.
Julián, Jay o Nailuj –su nombre artítistico- quería triunfar en la música. Había tenido mucho éxito en varios programas de televisión y había grabado varios videoclips.
El mismo componía sus canciones de trap, reggaeton y hip-hop. En Spotify, Nailuj, contaba con 2.500 oyentes mensuales y sus vídeos en YouTube superan las 35.000 visitas.
Julián no es la única víctima. También murió una clienta del local, una enfermera del País Vasco, que estaba pasando el fin de semana en Madrid con unas amigas.
Además, hay otras 11 personas heridas. De ellas, ocho continúan ingresados en varios hospitales de la capital, 4 de ellos en la UCI.