La Fiscalía pide dos años de cárcel para una mujer que en octubre de 2017 estampó un vaso contra la cara de un hombre que le había metido mano bajo la falda en una discoteca. Para él, el Ministerio Público solicita quince meses de cárcel por un delito de abuso sexual.
La sección quinta de la Audiencia de Barcelona juzga el próximo lunes al presunto abusador sexual y a la mujer a quien abordó, que se enfrenta a una pena superior por su airada reacción dado que la Fiscalía le acusa de un delito de lesiones, que prevé penas de hasta tres años de cárcel cuando las heridas causadas requieran tratamiento médico.
Los hechos que se juzgan ocurrieron el 14 de octubre de 2017 en el interior de la discoteca Salamandra de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), cuando el acusado, E.G., metió mano bajo la falda a la mujer investigada, que le dio un empujón para apartarlo.
La reacción de la mujer dio pie a que ambos iniciaran un forcejeo en el que el acusado agarró fuertemente por el cuello a la mujer, quien le golpeó en la cara con un vaso de vidrio que llevaba en la mano, según mantiene la Fiscalía en su escrito de acusación provisional.
A raíz de la agresión, E.G. sufrió una contusión e heridas inciso-contusas que requirieron puntos de sutura, lo que, como secuelas, le ha dejado un "ligero" menoscabo estético por el que el acusado reclama una indemnización.
El golpe con el vaso de cristal supone, para la Fiscalía, un delito de lesiones mientras que la agresión sufrida por la mujer cuando el acusado la agarró por el cuello constituye un delito leve de lesiones, castigado únicamente con penas de multa, dado que la cervicalgia que le provocó requirió únicamente una primera asistencia facultativa.
La Fiscalía acusa de un delito de abuso sexual y otro leve de lesiones al presunto acosador, por lo que además de los 15 meses de cárcel le pide una multa de 1.800 euros y que indemnice a la mujer con 330 euros.
Para ella, reclama 2 años de cárcel y que pague al coacusado una indemnización de 1.400 euros por las lesiones sufridas