Roger, el presunto asesino del entrenador del campo de tiro de Canovelles, en Barcelona, está desubicado y sin abrir la boca en la cárcel de Campos del Río, donde permanece en prisión preventiva.
Roger está acusado de asesinar a un trabajador del campo de tiro de Canovelles, en Barcelona, y secuestrar a dos mujeres en su huida. A punta de pistola las obligó a llevarle en coche hasta Murcia, donde fue detenido en la estación de autobuses, por dos policías que lograron desarmarle en un lugar muy concurrido en plena Semana Santa.
En aquel momento, el acusado llegó a decirles a los agentes que no entendía por qué no le habían matado, que él de haber tenido dos segundos más les habría disparado.
Ahora, Roger permanece en una cárcel de Murcia, la de Campos del Río, a la espera de ser trasladado a Cataluña.
Allí en Campos del Río permanece en un módulo con los presos más conflictivos, donde se mantiene callado y desubicado, según fuentes penitenciarias citadas por El Levante-emv.
No es un preso conflictivo y "no forma jaleos. Apenas abre la boca, sale al patio, come y cena", detallan las mismas fuentes.
Roger está acusado un delito de asesinato y otros dos de detención ilegal, de tenencia ilícita de armas y otro de resistencia.