La actriz y presentadora, Ana Obregón, se ha convertido en madre a sus 68 años por medio de gestación subrogada en Miami, Estados Unidos. Un proceso caro y largo, que solo unos pocos se pueden permitir. Sus imágenes con la recién nacida saliendo del hospital con la pequeña en brazos ha ocasionado un gran revuelo en España. Muchos critican el acto llevado por la actriz, afirmando, que está perpetuando un mercado capitalista que vende a mujeres como objetos con fin de satisfacer los caprichos de otros. Por otro lado, Obregón, ha sido criticada por la avanzada edad a la que ha sido madre.
En España, esta práctica es ilegal, así lo han remarcado múltiples políticos esta mañana. Pero se permiten otros métodos de reproducción asistida como la inseminación artificial. También existe la adopción, pero la máxima diferencia de edad que permite la ley entre progenitor e hijo es de 45 años. Pero la actriz no solo ha recibido críticas, también aplausos, como es el caso de Lina, quien ha señalado únicamente están "buscando felicidad. ¿Qué egoísmo es ese?". Una opinión que choca con la de los expertos, que señalan que la felicidad de una madre no puede estar por encima de los derechos de los niños.
Lina se convirtió en madre de una niña a los 62 años, desde entonces, asegura que le cambió la vida: "me dió un subidón de energía". Para poder ser madre se sometió a un tratamiento de reproducción asistida, para el que tuvo que mentir sobre su edad. Su caso, como el de Ana Obregón, es criticado por gran parte de la población al considerarla como egoísta al traer un bebé al mundo a sus avanzadas edades. Pero ella se defiende de las críticas, asegurando que "Nosotras estamos buscando nuestra felicidad. ¿Qué egoísmo es ese?", afirma Lina.
En el caso de Ana Obregón, actualmente tiene 68 años. Cuando su nueva hija tenga 20 años, ella tendrá 88. Lo que para muchos es una auténtica locura. "Vamos a tener una persona muy mayor con alguien que necesita mucha atención. Son generaciones radicalmente distintas", declara Guillermo Fouce, psicólogo. Para evitar casos similares, en España la ley fija una edad máxima para adoptar a un recién nacido. Únicamente puede existir una diferencia entre adoptante y adoptado de máximo 45 años, núnca se podrá sobrepasar esta meta.
"La clave está en que realmente la maternidad se pueda ejercer", señala José María Domínguez, miembro de la Comisión Deontológica OMC. Pero Lina discrepa de estas opiniones, ella reitera que su pequeña le cambió su vida. Le dió la felicidad que tanto tiempo había anhelado tras la sufrir por otro que había nacido con una grave discapacidad. Pero los psicólogos concluyen que "un duelo o pérdida no se supera con algo que lo sustituya", haciendo referencia a la muerte de Álex Lequio, el hijo de Ana Obregón que falleció en 2020 a causa de un cáncer.