El bailaor Rafael Amargo fue detenido el pasado jueves por un delito contra la salud pública y atentado a la autoridad. Se le detuvo en el marco de la investigación abierta a raíz de una denuncia interpuesta el pasado mes de julio por vecinos del inmueble por presunta venta de droga en su piso.
Tras la denuncia, el juez de Instrucción número 27 de Madrid acordó el pasado 16 de septiembre abrir diligencias y oficiar a la Policía para esclarecer los hechos. Tras ello, comenzaron el pasado mes de agosto las vigilancias sobre el piso del artista, donde se observaron a diario a toxicómanos entrar y salir de forma apresurada.
El abogado de Rafael Amargo, el letrado Jaime Caballero, sostiene que hay "una persecución" contra su cliente y cree que la fecha en la que se le ha detenido no es "casual", a dos meses de que sea juzgado por la denominada Operación Codax.
Amargo ya fue detenido el 1 de diciembre de 2020 junto a su pareja y otras dos personas por hechos similares. El juicio por esta causa se celebrará el próximo mes de junio por la presunta comisión de un delito contra la salud pública.
El fiscal solicita 9 años de cárcel por presuntamente vender en su propio domicilio de sustancias estupefacientes a terceras personas de manera "persistente" a cambio de dinero.
Caballero niega de forma tajante que el artista sea "un narcotraficante" de drogas y defiende que las sustancias que se le hayan podido incautar eran para consumo personal al ser una persona drogodependiente, una adicción de la que se está intentando rehabilitar desde hace tiempo.