La Guardia Civil halló en los dispositivos electrónicos del llamado 'carnicero tatuador' de Valdemoro (Madrid) varias imágenes de pedofilia y pornografía infantil, además de otras de contenido violento, como fotos de prácticas sadomasoquistas en las que aparecía la otra acusada en la causa, su exnovia Celia. Así lo han relatado los dos peritos de la Guardia Civil que hicieron un informe sobre el contenido del ordenador, de una tablet y del móvil de Leonardo Valencia tras su detención por su presunta implicación en la muerte de la joven Emilce C.L. el 16 de octubre de en 2019 en el municipio de Valdemoro.
El fiscal solo acusa a Leonardo, para quien pide 25 años y cinco meses de prisión por los delitos de asesinato y profanación de cadáver (el cuerpo estaba mutilado y recortado a semejanza de una lámina), mientras que las acusaciones particulares solicitan para él prisión permanente revisable y para la otra acusada, Celia, tres años de cárcel. Durante la sesión de este martes, el acusado llevaba consigo una carpeta con unas letras rojas y negras escritas a mano en las que se leía "butcher man" (carnicero en inglés) y, como en las vistas anteriores, ha escuchado los testimonios concentrado y con la mirada baja, salvo para hablar momentáneamente con su letrado.
Dos guardias civiles expertos en criminalística se han reafirmado en el informe que elaboraron durante la investigación, detallando que en el portátil del acusado encontraron seis imágenes de carácter pedófilo y cuatro de pornografía infantil, que aportaron a su informe porque les pareció relevante, al igual que el hallazgo de otras imágenes "violentas". El abogado de Leonardo ha expresado su queja por las preguntas relacionadas con esas imágenes de pedofilia y pornografía infantil, ya que para su investigación se abrió otra causa que acabó archivada, al determinarse que el ordenador había sido usado por otras personas.
La presidenta de la Sala no ha accedido a la queja y los agentes han precisado que el último acceso a estas imágenes había sido dos años antes del crimen. Los guardias civiles también han relatado que en una Play Station del acusado hallaron juegos de carácter violento, y en un "pendrive" "muchísimas fotos de contenido pornográfico", incluida una sesión de sadomasoquismo entre el procesado y una mujer que se determinó que era Celia, la otra acusada.
En estas imágenes, casi una veintena, se ve a la mujer desnuda y con una capucha en la cabeza, con marcas rojas de haber sido golpeada, y en una de las imágenes con una bota encima, "sometida". Sin embargo, los agentes no analizaron imágenes violentas relacionadas con la víctima, Emilce, aunque han detallado que el móvil del acusado tenía activado una "caja de seguridad" en la que tenía archivos, pero que no pudieron abrir pese a solicitarlo a la empresa de telefonía, Samsung.
Han precisado que aplicaron la misma tecnología que se usó en el móvil de la joven madrileña Diana Quer, que fue encontrado en el mar tiempo después del crimen, pero en esta ocasión sin resultado. Esa "caja de seguridad" fue activada tras el crimen, según han explicado los peritos, lo que hizo pensar a los investigadores que Leonardo pudo haber grabado imágenes de la noche del crimen, aunque este extremo no se ha confirmado. El juicio continuará este miércoles con declaraciones de más peritos.