La Policía Nacional está investigando la difusión de peleas entre adolescentes y agresiones a menores a través de un grupo abierto de la aplicación de mensajería Telegram en Valencia. En las imágenes se puede ver a jóvenes golpeándose mientras otros les jalean y aplauden.
Las autoridades creen que detrás de esas imágenes de violencia explícita puede haber casos de acoso escolar, por lo que se están investigando las imágenes.
Por el momento no consta ninguna denuncia por estos hechos, aunque algunos padres ya han reconocido que sus hijos aparecen en algunos de esos vídeos siendo agredidos. Además, una menor de 14 años que aparecía en un vídeo siendo agredida ha informado en exclusiva al medio Levante-EMV que fue víctima de acoso escolar por parte de dos compañeras.
La joven sufrió un auténtico infierno, y ha admitido que el pasado verano, al ver el vídeo en el que se la veía siendo agredida, intentó quitarse la vida. La madre de la menor asegura que "se quiso tirar por el balcón" por el dolor y el sufrimiento que sentía.
Al principio la madre de la menor no sabía qué le ocurría a su hija, pero después descubrió el vídeo que circulaba por redes sociales, en el que además de agredir a la joven, la sometían a actos denigrantes de carácter sexual con un bocadillo.
Aunque la madre se planteó denunciar los hechos, y llegó a acudir a comisaria para enseñar el vídeo, finalmente no interpuso la denuncia ya que el acoso a su hija había cesado tras el final del curso y creía que la denuncia podría agravar los problemas con la familia de una de las agresoras.
El canal de Telegram se creó el pasado 23 de enero y cuenta ya con 743 suscriptores. Sin embargo, como se trata de un canal abierto, cualquiera puede ver el contenido entrando en él e incluso descargarse los vídeos de las agresiones.
El tipo de peleas que aparece en los vídeos suele producirse a la salida de los colegios e institutos. En las imágenes se ve cómo jóvenes quedan expresamente para pegarse y grabarlo con los móviles, para después publicarlo.