El caso Dani Alves ha sido parte protagonista de la entrevista de Gerard Piqué en el programa El Món de Rac1. La sensación de incredulidad domina la reacción de Piqué, que como siempre, es claro y rotundo, sin rodeos. "Ha sido "como una hostia con la mano abierta" para todos aquellos que han convivido muchos años con él". El shock, según sus palabras, ha sido jodido. "Es un caso complicado, le conozco y lo aprecio. Quiero que la justicia haga su trabajo. Hasta que no me digan que lo ha hecho, hay que esperar. Lo fácil es decir que es culpable, quiero esperar a lo que diga el juez, y lo que diga hay que acatarlo. Y ayudar a la víctima en el proceso. Es muy complicado", ha destacado el jugador.
Cuando sale la noticia de la presunta violación y Dani Alves acaba en la cárcel a la espera de juicio, Piqué se queda, como gran parte de la sociedad, desconcertado. "Yo, como excompañero, tengo la sensación de que no le conozco. Te quedas en estado de shock porque dices 'si lo hemos compartido todo'. Lo ves y no lo pensarías nunca".
Piqué no duda en que todo el peso de la ley caiga sobre Dani Alves si se demuestra que es culpable, aunque pide ser precavidos y no juzgar de forma anticipada: "No te lo esperas, es una hostia con la mano abierta. Si ha pasado, hay que ser duro con él y con todo. Yo sería incluso más duro de lo que es ya la justicia. Estoy en contra de la gente del movimiento del sí es sí o es no. Nos tenemos que respetar hombres y mujeres, ojalá un mundo que no pasara esto. Sería inflexible y duro si pasa esto que parece que ha pasado.", ha señalado el exjugador.
Gerard Piqué siempre ha tenido a sus padres como referencia en la vida y lo ha destacado en su entrevista con Rac 1: "Tienes pasiones y cuando las tienes pues a muerte... mi madre decidió ser doctora porque era su pasión y le dedicó el corazón y el alma, y por eso es una referencia. Y mi padre y mi hermano, también. Me mueven las pasiones a mí también. Todos estamos sonados a nuestra manera".
Respecto a su relación con Shakira tras las últimas canciones en las que él se ha convertido en protagonista, Piqué ha sido claro. "No quiero hablar. Tenemos una responsabilidad, los que somos padres debemos proteger a nuestros hijos. Cada uno toma sus decisiones. No tengo ganas de hablar más. Sólo quiero que mis hijos estén bien. Siempre he tenido una relación próxima con mis hijos, me pidió salir en la Kings League... le hacía ilusión. Nada me hace más feliz que hacer feliz a mi hijo. Lo volvería a hacer. Parece que tenga más años de los que tiene. Cada uno toma las decisiones que cree las mejores. Yo hago las cosas de una manera, intento hacerlo de la mejor forma. Yo estoy bien, feliz. Con muchas ganas de continuar haciendo cosas y que el Barça siga ganando".
Respecto al caso Negreira, Piqué, en su línea, no se ha escondido. "No sabía nada. Esto es más de cara al entrenador y staff técnico. Los jugadores ya conocemos a los árbitros, los entrenadores pueden venir de fuera y pueden necesitar ayuda. Yo no sé si el trabajo era ser ayudante. Nosotros estábamos fuera y no teníamos conocimiento. No lo he conocido a él, ni al hijo. No creo que el Barça haya comprado a los árbitros, pondría la mano en el fuego. Vas con dinero negro y ya está, las cosas son más sencillas que no ir al vicepresidente del CTA y pagarle un salario. No tiene lógica. Las conspiraciones y campañas... estamos acostumbrados".