Una tía de las gemelas de Sallent denuncia que “los servicios sociales estaban al corriente del bullying”

Los Mossos d’Esquadra continúan las investigaciones para averiguar qué llevo a las dos hermanas gemelas de Sallent, Barcelona, a tirarse por la ventana de un tercer piso. Una de ellas murió, mientras la otra sufrió heridas graves. Al parecer, la identidad sexual de una de ellas, que se sentía incomprendida, tendría mucho que ver, y no se descarta tampoco el acoso escolar.

Desde el centro educativo y el Departamento de Educación se dijo inicialmente que no había abierto ningún expediente por bullying hacia ellas, pero las autoridades, que consideran que ese pronunciamiento fue precipitado, analizan también este escenario porque tanto el Ayuntamiento como el entorno de las niñas ha confirmado que recibían ayuda económica y psicológica. De hecho, rectificando la postura de ayer, la Consejería de Educación ahora también lo reconoce: estaban en un proceso de ayuda en el centro.

“El bullying, el chantaje emocional… Los servicios sociales estaban al corriente de toda esta situación”, ha denunciado una tía de las niñas.

También la abuela de las gemelas se ha pronunciado en el mismo sentido, declarando que ambas sufrieron acoso “en el colegio”, mientras “en el instituto siguieron con problemas”.

Esta versión también la corroboraba ante las cámaras la madre de un compañero de las niñas, que ha develado que la fallecida, Alana, quería ser niño y llamarse Iván, añadiendo que a veces también “se reían de ellas” tanto “por el cambio de nombre” como por el acento.

Oriundas de Argentina, habían llegado a la localidad hace un año y medio y su entorno insiste en que estaban sufriendo muchos problemas de adaptación con sus compañeros.

Por su parte, desde su centro, el Instituto Llobregat, en el que cursaban 1º de ESO, inicialmente han negado que existiera bullying por ningún motivo, ni por identidad de género, ni por la nacionalidad. Los Mossos, sin embargo, mantienen la línea de investigación abierta. La familia, con pocos recursos, estaba recibiendo asistencia y las niñas iban a empezar las visitas al psicólogo, pero el entorno familiar lamenta que la atención psicológica llegó demasiado tarde. Dicen que llevaban tiempo reclamándola y que la primera visita la tenían programada para el día en que sucedieron los hechos, y por lo tanto ya no pudieron ser atendidas.

Ahora, la investigación continúa sin que se descarte ninguna hipótesis. Desde la Generalitat, tras las nuevas informaciones que apuntan a que las gemelas podían haber sufrido burlas tanto por su origen como por el hecho de que una de ellas quisiese llamarse Iván al sentirse un niño, ha activado la Unidad de Apoyo al Alumnado en situación de Violencia (USAV) con el objetivo de recopilar más información y ayudar a esclarecer lo sucedido; una investigación paralela a la que llevan a cabo los Mossos d’Esquadra por orden judicial.

Mientras, desde el centro educativo los compañeros de las gemelas han querido enviar muestras de apoyo y cariño a la familia escribiendo una multitud de mensajes en sus pupitres. Entre ellos, destaca el nombre de la menor fallecida, Alana: “Te vamos a echar de menos”. “Descansa en paz”, se lee.

Además, en él también trasladan fuerza a su hermana Leila desde un deseo compartido: “Espero que te recuperes”.

También el lugar de nacimiento de ellas, Argentina, destaca junto a un mensaje más: “Iván, te queremos”, en referencia al nombre con el que la menor fallecida quería que le llamasen.

Paralelamente, mientras la investigación prosigue, también una multitud de mensajes y gestos de recuerdo se suceden junto al portal en el que reside la familia.