La Ciudad Autónoma de Ceuta ha guardado este lunes un minuto de silencio como muestra de dolor, condena de lo sucedido y en solidaridad con los familiares de Mohamed Alí, el joven de 17 años que fue asesinado hace un año y cuyo cuerpo fue arrojado a un terraplén en un monte de la ciudad.
El presidente de la Ciudad, Juan Jesús Vivas, ha presidido este acto convocado a las puertas del Ayuntamiento de la ciudad y donde han asistido también numerosos diputados de la Asamblea ceutí así como el delegado del Gobierno, Rafael García.
El momento más emotivo del acto se ha producido cuando la madre del joven, Asma Mohamed, se ha sumado al mismo. Acompañada de familiares y amigos, y completamente vestida de blanco, ha estado presente en este minuto, no pudiendo contener las lágrimas.
Vivas ha tratado de consolar a Asma, que al finalizar el acto ha tenido que entrar en el Ayuntamiento de la ciudad visiblemente emocionada.
El presidente autonómico ha declarado a los periodistas que "hemos sido testigos del drama y el dolor de esta madre que no tiene consuelo y que está plenamente justificado, pero aquí estamos todos desde la unidad para mandarle apoyo a esta madre y a este familia por este trance tan duro y tan difícil".
El delegado del Gobierno, Rafael García, ha agradecido la labor de los cuerpos y fuerzas de seguridad y ha trasladado el pésame a los familiares.
Una discusión entre Mohammad Alí, de 17 años, y uno de los tres detenidos por su asesinato fue el detonante que desencadenó la muerte del joven, quien posteriormente fue arrojado a un terraplén en un monte de la ciudad.
Fuentes próximas a la investigación han informado a EFE que las indagaciones policiales -que permanecen bajo secreto de sumario- han determinado que el joven mantuvo una fuerte discusión con uno de los detenidos -el menor de 17 años-, supuestamente por unas imágenes que la víctima tenía en su teléfono móvil.
Esta situación provocó una fuerte pelea entre ambos y acabó con los golpes que el menor propinó supuestamente a Mohammad Alí con un bate de béisbol.
Desde este pasado miércoles permanecen en prisión preventiva el adulto, mientras que el menor de 17 años -al que se considera autor material del asesinato- y la mujer, de 18 años, están ingresados en el centro de reforma de Punta Blanca ya que en el momento de los hechos la joven todavía no tenía la mayoría de edad, como han determinado los jueces para decretar su medida de ingreso en el reformatorio.