La Guardia Civil, en el marco de la operación Calaveda, ha desarticulado un grupo criminal dedicado a extorsionar a personas que demandaban servicios sexuales a través de Internet.
Han sido detenidas 22 personas e investigadas otras 18 por realizar al menos 65 delitos de extorsión por el método del “Timo del Sicario”, donde amenazaban a sus víctimas con enviarles un sicario a su domicilio si no realizaban un pago económico.
Para dotar de credibilidad a sus pretensiones, los autores investigaban a fondo la vida privada de las víctimas.
A través de las redes sociales localizaban a su círculo cercano y encontraban información sobre su vida personal y situación laboral con el objetivo de extorsionar la mayor cantidad de dinero posible.
Los detenidos e investigados se aseguraban de poner fotos de perfil con un semblante amenazante con personas encapuchadas y portando armas.
También remitían a las víctimas fotografías con contenido escabroso, cuerpos mutilados, decapitaciones y amputaciones, así como vídeos de personas encapuchadas empuñando armas de fuego.
Las llamadas amenazantes provenían de números de teléfono con origen tanto de España como de República Dominicana, con personas con acento latinoamericano en tonos amenazantes.
El grupo criminal se dividía en tres estructuras localizadas en Madrid, Santander y Barcelona, si bien los componentes de cada grupo se organizaban en distintas labores: tres eran los cabecillas que tomaban el rol de captadores de mulas y líder de cada estructura local, 19 eran mulas económicas y 18 eran colaboradores al ser titulares de las líneas telefónicas o cuentas bancarias utilizadas para cometer las extorsiones.
Hasta el momento, los investigadores han ubicado 65 víctimas en numerosos municipios distribuidos por todo el territorio nacional pero durante la operación la Guardia Civil descubrió que los autores habían intentado obtener más de 110.000 euros, llegando a conseguir alrededor de 30.000 euros.