La delincuencia ha crecido en los nueve primeros meses del año en España un 5,5% respecto al mismo periodo de 2019, el año anterior a la pandemia, si bien algunas tipologías han aumentado considerablemente, como las agresiones sexuales con penetración, con un 38% más. Según el balance de criminalidad hecho público este viernes por el Ministerio del Interior, entre enero y septiembre se cometieron 1.734.625 infracciones penales.
Todas las tipologías delictivas subieron en ese periodo en relación a los nueve primeros meses de 2019, salvo los homicidios, los robos con violencia e intimidación, incluidos los cometidos en las viviendas, y la sustracción de coches. Interior resalta el importante alza en la cibercriminalidad, que ha aumentado un 89,3%.
Del total de infracciones penales registradas entre enero y septiembre, es decir, de los 1.734.625 delitos, el 87,5% corresponde a la criminalidad convencional, en tanto que el resto a la cibercriminalidad (217.571 infracciones penales, el 12,5% del total).
Interior destaca el incremento de este tipo de delitos, en concreto un 89,3% sobre 2019, pero advierte de que, no obstante, por razones de tratamiento estadístico, las cifras totales de cibercriminalidad correspondientes al ámbito de actuación de la Ertzaintza y los Mossos d’Esquadra no estarán disponibles hasta el balance final anual, por lo que serán superiores.
Por tipos penales, el indicador de las estafas informáticas (191.160 delitos, que representan el 87,9% de toda la cibercriminalidad y el 11% de toda la delincuencia registrada hasta septiembre) presenta un repunte del 96,6% sobre el mismo periodo de 2019.
En cuanto a los delitos contra la libertad sexual, su subida continúa en una tendencia de fuerte aumento iniciada, sobre todo, a partir del año 2014, recalca el Ministerio. Así, explica que en los nueve primeros meses de este año se han registrado 13.455 casos, frente a los 10.343 del mismo periodo del año anterior a la pandemia, lo que representa un alza del 30,1%, que se eleva al 38% en el caso concreto de las violaciones.
De todos modos, Interior insiste en que ese incremento "debe ponerse, en parte, en relación con las activas políticas de concienciación y de reducción de la tolerancia social y personal, que se traducen en una mayor disposición de las víctimas a denunciar estos delitos y a poner sus casos en manos de las fuerzas de seguridad".
Incide Interior en este argumento y asegura además que, gracias a esa mayor concienciación, la tasa de esclarecimiento de estos delitos se sitúa en torno al 80%. Por ello, concluye que los niveles de infradenuncia que han podido y pueden existir se están reduciendo.
Respecto a otros delitos, el balance del tercer trimestre refleja un aumento del 13,1% en el tráfico de drogas respecto a 2019, con 14.361 infracciones penales. Una vez más, Interior atribuye este repunte a la actuación de la Guardia Civil y de la Policía Nacional en el Campo de Gibraltar.
Asimismo, recalca que los delitos contra el patrimonio (indicadores de robos, hurtos y sustracción de vehículos), que representan el 42% de la criminalidad convencional, descienden en conjunto un 10,2%. Los robos con violencia o intimidación lo hacen en un 2%, los robos con fuerza en domicilio, establecimientos y otras instalaciones bajan un 15,9%, los hurtos caen un 9,7% y la sustracción de vehículos, un 12,4%.
Por otra parte, los homicidios consumados (un total de 237) retroceden un 4,8% y los intentos de homicidio (868) suben un 38%.