Con la llegada de las Navidades las cenas de empresa se multiplican a lo largo de todo el país, por unas horas se cambia la oficina por un restaurante con alcohol de por medio.
Si no quiere arrepentirse al día siguiente de una cena o comida de empresa, tengan en cuenta estos consejos tan básicos como útiles.
Los errores pueden empezar incluso antes de salir de casa, no confundir cena de empresa con nochevieja, boda o alfombra roja.
Cuidado con llegar el último a la mesa, ya entramos con la copa en la mano, pero toca relajarse y no se aconseja excederse.
Una cerveza, un vino, una copa de cava, de ahí al exceso de confianza hay solo un paso.
Especial cuidado con ese chupito que suelta la lengua, que desinhibe, pero es necesario recordar que hoy todo queda ahí, para el día siguiente.