Cada año, unos 2000 médicos españoles se marchan en busca de un salario más alto y, en definitiva, mejores condiciones laborales. Hemos querido conocer de primera mano cómo trabajan nuestros profesionales, por ejemplo, en Nueva York, EEUU.
Allí, Idoia Corcuera trabaja como radióloga en este hospital académico en el que aceptan seguros médicos subvencionados por el Estado. Es lo más parecido a un centro público en España si no fuera por las condiciones laborales.
“Yo tengo un horario bastante bueno. Empiezo a las nueve de la mañana y trabajo hasta las cuatro y media o cinco, con posibilidad de trabajar desde casa en algunos de nuestros turnos y con guardias voluntarias”, explica.
Siempre hay profesionales dispuestos a hacer una de estas guardias. Se están pagando 1000 dólares por un turno de cuatro horas, un extra que viene acompañado de muchas más ventajas.
“Hay muchos más recursos. Se invierte mucho en la Formación Profesional”, añade.
El sueldo de un médico especializado como Juan Carlos Rodríguez, director de cirugía pediátrica en el NYU Langone, es un 80% más alto que en España.
“Volví con mi currículum a la Seguridad Social y nunca me daban trabajo”, indica, explicando que las razones para el rechazo eran que “estaba muy especializado y querían a alguien menos especializado”.
Cada año, casi 2000 sanitarios españoles se van a trabajar al extranjero, a pesar de que nuestro país tiene un déficit de 5000 médicos. Una fuga de talentos que están aprovechando los hospitales de otros países para llenar sus canteras.