Rodrigo América es un creador digital brasileño reconvertido en 'inluencer' que sueña con ser como Elon Musk y viajar a Marte en una de sus misiones espaciales. Su fervor por el flamante dueño de Twitter ha calado tan hondo en sus deseos que se ha tatuado su nombre en la frente junto a un cohete porque sueña con conocer a alienígenas
En declaraciones a medios locales recogidas por el diario argentino El Economista, América confiesa su convencimiento de que existe vida más alla del Planeta Tierra y de que seres inteligentes estarían esperándonos.
Su fe en la existencia de estos seres de otros mundos no es producto de una invención personal sino que asegura haber oído el llamamiento de algunos de ellos que le comninaron a "buscar conocimiento" motivo por el cual dejó su trabajo como funcionario de prisiones y tras abandonar "el sistema" se na dedicado por completo a investigar y promocionar esta idea de la vida extraterrestre.
Y es en este punto en el que nace su pasión por Elon Musk, el magnate estadounidense (también comparte nacionalidad canadiese y sudafricana) creó en 2002 la empresa SpaceX con la que planea viajes por el espacio. Esta posibilidad de explorar el universo es la que atrae a Rodrigo América y le impulsa a adorar a su venerado Elon Musk grabándose su nombre en la frente junto a un cohete espacial.