Desde la aprobación de la Ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual, conocida popular mente como la 'Ley del solo sí es sí', ha habido una aluvión de peticiones de condenados para que se les rebaje la condena debido a las nuevas tipificaciones que expresa esta. Un profesor de Primaria, condenado por abusos sexuales ante menores, ha sido uno de los beneficiarios. El mismo día que entró en vigor dicha ley, que suprime el delito de abuso sexual y rebaja la pena mínima de cárcel, el excondenado fue puesto en libertad. Ahora, estudia pedir una indemnización al Estado por todo el tiempo extra que ha estado en prisión.
La nueva ley aprobada por el Gobierno rebaja las penas de los condenados por delitos sexuales basándose en el Código Penal, así como suprime la diferencia entre el anterior delito de abuso sexual y agresión sexual. Al igual que decenas de condenados, este exrecluso ha salido fuertemente beneficiado. El hombre era un profesor de inglés en un colegio público de San Sebastián de los Reyes (Madrid) y ha pasado más de tres años en prisión, aunque fue condenado a 6 años y 9 meses el pasado mes de enero de 2022, por abusar en repetidas ocasiones de tres menores del centro en el que ejercía, tenencia de pornografía infantil y corrupción de menores al "invitarles a su domicilio", según señala la sentencia.
Tras la denuncia por parte de unos alumnos y ex alumnos del profesor en el verano de 2019, el juez decretó para este el ingreso en prisión preventiva en la cárcel madrileña de Soto del Real, según ha explicado el abogado del hombre a OKDIARIO. Después de pasar más de tres años y tras la aprobación de la ley de Garantía de la Libertad Sexual fue puesto en libertad, "por orden y gracia de la ministra Irene Montero, porque la aplicación de la Ley es obligatoria para casos de hombres y mujeres, que la Ley no discrimina", ha afirmado su abogado, que ha explicado que esto se ha producido porque el delito de abuso sexual ha dejado de existir.
"Ahora a consecuencia de la reforma el delito de abuso sexual no existe y por tanto se queda sin efecto la condena de seis años y 9 meses y sólo se queda en un año por corrupción de menores y posesión de pornografía infantil", condena que ya ha cumplido de más. Por lo que junto a su abogado planea pedir una indemnización. Para poder acceder a ese pago el abogado del profesor podría apelar a una sentencia del Tribunal Constitucional que fijó el derecho a una indemnización por casos de prisiones provisionales que no acabaran en condena. El tribunal fijaba que debía tratarse por igual a todos los que, tras pasar por prisión preventiva, resultan absueltos o ven cómo su causa se archiva sin llegar siquiera a juicio, aunque en este caso sí que hay una condena resuelta.