Gerard Piqué y Shakira han llegado por fin a un acuerdo sobre dónde vivirán sus hijos tras su separación. Finalmente será la cantante la que se lleve a los niños a Miami el próximo año 2023.
La expareja ha firmado un acuerdo en lo que se ha considerado la 'reunión definitiva' entre el futbolista y la cantante colombiana. Así, se ha puesto fin al principal conflicto que tenía la pareja después de dejar su relación.
La decisiva reunión terminó a altas horas de la madrugada. Fueron casi 12 horas de intensas negociaciones, según recoge El Periódico. A la reunión, que se celebró en la casa de Shakira en Esplungues, que fue en su momento el domicilio familiar, acudieron los abogados de ambas partes.
La alternativa, ir a juicio y que fuese un juez quien decidiese el 'destino' de los pequeños Milan y Sasha, era algo que ninguno estaba dispuesto a aceptar, por lo que este nuevo cara a cara en la casa de la colombiana se preveía el último cartucho para llegar por fin a un pacto con el que ambos estuviesen conformes.
Pese a que en un primer momento se dijo que Gerard había dado plantón a su expareja, poco después se filtraba que el futbolista había logrado esquivar a las cámaras llegando a la 'cumbre' en torno a las 14 horas a través del anexo en el que viven los padres de Shakira.
Después de 12 horas de agónica reunión, tanto el defensa como los abogados de la cantante y el culé abandonaban el lugar confirmando que por fin había acuerdo, del que sin embargo han evitado entrar en detalles.
Un acuerdo cuyos flecos se están ultimando y que incluye que los niños pasarán en Barcelona las Navidades; en cuanto comience 2023 se mudarán a Miami con su madre. A cambio, Piqué podrá cruzar el Atlántico para verlos siempre que quiera - algo más factible tras su retirada del fútbol - y los gastos de sus viajes irán a la cuenta común. Una decisión que le ha costado mucho tomar, pero que ha hecho por el bien de Milan y Sasha, su gran prioridad en estos momentos.