Esperada y deseada por muchos, la noche más terrorífica del año ha pasado por España entre espeluznantes disfraces, muchos sustos y… también polémicas y altercados. En la cada vez más popular fiesta de Halloween las autoridades han tenido que emplearse a fondo acometiendo múltiples detenciones, desalojos y cierres de locales por incumplir la normativa de seguridad.
Conscientes del aumento de las fiestas y celebraciones masivas organizadas para la ocasión, las fuerzas del orden habían dispuesto dispositivos en distintos puntos del país ante posibles conflictos y altercados. En Sevilla, –donde ya desde el fin de semana la polémica estaba servida tras conocerse el caso de un local que preparó una fiesta de Halloween para menores en un ambiente irrespirable, sin ventilación y sin agua, provocando que 20 menores tuvieran que ser atendidos entre desmayos y crisis de ansiedad–, la última noche también ha acabado con la intervención de las autoridades. En el recinto de la Feria de Abril, 18 menores han sido detenidos por agredir y robar a varias personas que se encontraban celebrando la fiesta. Actuaron vestidos de negro, con los rostros tapados con pasamontañas u otros objetos. “No tenían más motivación que la propia agresión”, ha denunciado un padre de una de las víctimas.
Solo en la capital andaluza, además, se han precintado 7 locales por celebrar fiestas de Halloween que no tenían licencia o superaban el aforo permitido. Cerca de 4.000 jóvenes han sido desalojados.
Algunos de ellos, lo vivieron de forma completamente inesperada: “De un momento a otro nos han dicho que nos vayamos. Han parado la música, se han encendido las luces y nosotras no entendíamos absolutamente nada”, explicaban unas jóvenes en uno de los establecimientos sevillanos donde se practicó un desalojo de urgencia por superarse el aforo.
“Estaba completamente llena; un agobio impresionante”, han relatado algunos testigos, mientras otros denunciaban que les habían dejado fuera “sin el dinero” y “sin ningún tipo de explicación”.
También en Barcelona la policía permanecía pendiente de cualquier posible altercado, algo “básico para que la seguridad en el exterior de los locales sea efectiva y la gente esté segura” según señala Ramón Más, presidente de España de Noche.
También en Madrid se han practicado controles exhaustivos a la entrada de otra conocida discoteca. Entre los objetivos: “Que no entren a este evento con ningún tipo de arma blanca. Que no accedan con ningún tipo de estupefacientes”, según señalaba Ana Martín, portavoz Guardia civil
También en Valencia se incrementaba la presencia policial. Aquí se cerraron parques y el botellón se quedó en casa. No así en Vigo, donde disfrutaron de uno un tanto terrorífico y que… acabó dando miedo tras terminar la fiesta, juzgando el estado en que quedó el lugar.