El pasado fin de semana la tensión fue en aumento en El Príncipe, Ceuta, a cuenta de la guerra que mantienen por el control del narcotráfico los Piolín y los Tayenas. Hasta el punto de que ha acabado por la vida de un militar de 35 años en el garaje de su casa. Dris, que no estaba metido en nada ilegal, aseguran quienes le conocen, murió desangrado por las heridas de bala.
Dris, cabo del Grupo de Regulares 54 con base en Ceuta y padre de dos niños, recibió varios impactos de bala en la cintura y las piernas por “error”, según la investigación.
La Policía estaba realizando maniobras de control en el barrio de El Príncipe de Ceuta cuando oyeron las detonaciones en el garaje de la cada familiar del militar. Al llegar lo reanimaron y una ambulancia lo trasladó al hospital, donde murió horas después.
Desde el pasado viernes, según informa el diario El Mundo, los incidentes en El Príncipe a cuenta de los Piolín y los Tayenas no han dejado de repetirse. El viernes un operativo tuvo que salir de la barriada a pedradas. Algunos agentes resultaron heridos. Iban a registrar la casa de un vecino acusado de disparar a otro. Después ocurrió el asesinato de Dris, inocente para quienes lo conocían.
“Lo han matado porque lo han confundido con otra persona”, gritaban desde el balcón de la vivienda de Dris cuando su presunto asesino fue llevado esposado hasta el garaje lo mataron. “No estaba metido en ninguna banda criminal. Lo han confundido. Han ido a por él cobardemente y lo han matado. Les haremos salir de sus madrigueras cueste lo que cueste”, señalaba otro vecino. Por la muerte de este soldado hay ya tres detenidos.
A la muerte del militar, hay que sumar la de Ibrahim, un menor de 16 años el pasado abril también por “error”. Iba de paquete en una moto que debía estar ocupada por el líder de una banda de delincuentes.
Según el citado diario, la rivalidad entre las dos bandas por hacerse con el control del narcotráfico en El Príncipe ha aumentado desde que la presión policial hace efecto en el Campo de Gibraltar.