Un preso de la cárcel de Figueres le ha pegado un puñetazo a otro acusado de torturar y matar a su novia en un crimen machista horrible. El herido no tiene lesiones aunque si ha necesitado atención médica. La prisión ha aumentado la seguridad.
Alberto P., acusado de acusado de la muerte atroz de su novia, una chica de 21 años, Anna G., en Campdevànol, ha sido agredido en la cárcel de Figueres, donde solo llevaba dos días. Otro interno le ha dado un fuerte puñetazo.
El acusado del crimen machista no presenta daños pero su necesitó atención médica. La dirección de la cárcel de Figueres, en Cataluña, ha aplicado el artículo 75 del reglamento penitenciario y ha tomado medidas para preservar su integridad. No obstante, fuentes penitenciarias han negado a Informativos Telecinco que el presunto asesino de Anna G. esté en una celda de aislamiento,
Alberto P. esté en prisión provisional ordenada por el juzgado de Figueres que instruye la investigación por los delitos de asesinato y agresión sexual y a petición del fiscal, Enrique Barata.
La autopsia ha revelado que en el cadáver de Anna G. había más de sesenta heridas abiertas, hematomas y cortes por todo el cuerpo–también en los genitales- y fracturas en la nariz y la dentadura.
Los investigadores creen que a la joven de 21 años de Campdevànol, Girona, la torturaron durante horas o días. Su novio llamó al 112 cuando ella ya estaba muerta. Antes había limpiado la casa y a ella la duchó y secó. El presunto asesino contó que su novia se había caído en una ruta en bici días antes.
Alberto y Anna llevaban poco más de un año juntos. Según el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) no existían denuncias previas interpuestas contra el acusado.