La Guardia Civil ha asestado un duro golpe a una de las bandas criminales más peligrosas del mundo, el clan Kinahan, deteniendo a su cabecilla John Francis 'Johnny' Morrissey acusado de blanqueo de capitales, dónde en poco más de año y medio podrían haber blanqueado más de 200 millones de euros, así como su vinculación con al menos 38 asesinatos en la Costa del Sol.
La operación Whitewall, llevada a cabo por la Guardia Civil y coordinada internacionalmente por la Unidad Técnica de Policía Judicial (UTPJ), logró desarticular gran parte de la infraestructura que tenía en territorio español este grupo de origen irlandés y arrestando a gran parte de sus integrantes. La organización, además de dedicarse al blanqueo de capitales, tenía una importantes red de tráfico de drogas y armas. En otra operación a principios de 2021, la fuerzas de seguridad intervinieron más de 200 kilos de cocaína y cerca de 500.000 euros en efectivo, que transportaban a través de vehículos “caleteados”, es decir, con sofisticados sistemas de ocultación en su interior.
Según ha informado el instituto armado, el cabecilla de la estructura en España se dedicaba a recoger grandes cantidades de dinero en metálico de organizaciones delictivas que operan en España, entregándolas a grupos organizados de otros países y viceversa.
Los principales dirigentes de la organización en España habían creado una "lujosa" marca de vodka, que promocionaban en espectáculos, fiestas y eventos y restaurantes de lujo de la Costa del Sol. Con ella, los criminales aparentaban tener una exitosa vida gracias a la marca, que en realidad estaba soportado por sus actividades ilegales según confirmo la Agencia Tributaria.
De igual manera, habrían fundado otra sociedad en Reino Unido dependiente de otra empresa fijada en Gibraltar para ocultar la verdadera identidad de los criminales en sus transacciones mercantiles que usaban para blanquear los capitales procedentes de "Hawala"
Hawala es un milenario sistema financiero, surgió en Oriente Medio con la famosa ruta de la seda, y la evolución de estas transferencias informales de fondos a la actualidad pasa por la comunicación por vías encriptadas de códigos, conocidos como “token”, entre los emisores/receptores del dinero y los “hawaladares” que participen en la organización.
De estas operaciones no queda ningún registro legal ni identificación de los clientes, desconociéndose el origen de los fondos y su destino convirtiéndolas en totalmente opacas al sistema financiero legal.
La operación Whitewall encabezada por la Guardia Civil ha acabado con la detención de tres personas en España y una en Inglaterra, así como multitud de registros en ambos países. Uno de los detenidos es "Johnny" Morrisey, el cual estaba catalogado para Europol como HVT (High Value Target), "personaje de alto valor", es decir, que era la detención más importante.
Ya que según Estados Unidos ocupaba una posición determinante en el segundo escalafón directivo del clan. En concreto, el Departamento del Tesoro notificó que su papel consistía en “ayudar materialmente, patrocinar o proporcionar apoyo financiero, material o tecnológico, o bienes o servicios para apoyar a la organización criminal de los Kinahan”, para llevaba trabajando durante años, “incluso como sicario e intermediario de los envíos internacionales de drogas para la organización desde América del Sur”.
Otro de los detenidos es la mujer de John, Nicola, ambos residían juntos en la costa del sol desde hacía 20 años aparentando ser grandes empresarios controlando numerosas viviendas, gimnasios y restaurantes de lujo que presumían a través de las redes sociales.
En la operación en la que la Guardia Civil ha contado con la ayuda internacional de NCA británica, DEA estadounidense, Politei de Holanda y Garda irlandesa y una oficina móvil del Centro Europeo de Delitos Financieros y Económicos (EFECC) de Europol han intervenido varios vehículos con dobles fondos, dinero en efectivo y abundante documentación y dispositivos electrónicos, de gran interés para la investigación, motivo que deja esta operación abierta, no descartándose nuevas detenciones.