A 9 de cada 10 personas les gustaría mejorar algo de su aspecto físico, según los datos del estudio elaborado por Allergan Aesthetics. El rostro es la zona que le gustaría mejorar a un 79% de las personas, mientras que a un 56%, son el área del abdomen y la cintura lo que más les preocupa. Además, la aparición de signos de envejecimiento es una de las motivaciones principales para someterse a un tratamiento no quirúrgico.
La Doctora Paula Andrea Benítez cree que la medicina estética puede ser una aliada para aquellas personas que deseen mejorar algún rasgo de su aspecto. Según sus palabras "es importante acompañar al paciente en sus decisiones y, para eso, es fundamental el papel que juega el médico que como experto podrá realizar una valoración personalizada para alcanzar el resultado deseado".
Según los datos del estudio, verse bien puede aumentar la confianza y la autoestima en un 84% de los casos. Además, el 91% afirma que se lo contaría a un amigo, familia o pareja si se hiciera un tratamiento no quirúrgico, demostrando que la medicina estética cada vez está más normalizada.
Rosi Vivancos, directora general de Allergan Aesthetics, an AbbVie company de España y Portugal, considera que “nuestro mayor reto es seguir apoyando a la medicina estética y a los médicos que la practican, para que se le conceda el valor y la seriedad que requiere, porque la medicina estética es por encima de todo medicina, asociada con el bienestar, autoestima y seguridad de los pacientes que la reciben. Conseguir que las personas crean en sí mismas y se sientan satisfechas con lo que son y con lo que proyectan en la sociedad es crucial para nosotros, ya que tiene un reflejo tanto en nuestra vida personal como laboral. Vernos bien, ayuda a sentirnos bien”.
La medicina estética y sus profesionales pueden ser un apoyo para ayudarnos a encontrar la mejor versión de nosotros mismos.